Un locutorio telefónico muy frecuentado
05-08-04
11-M
Un locutorio telefónico muy frecuentado
FERNANDO LAZARO
11-M
Un locutorio telefónico muy frecuentado
FERNANDO LAZARO
MADRID.- Ni una, ni dos, ni tres. Hasta cuatro veces ha sido violentado el precinto del locutorio telefónico que tenía en el madrileño barrio de Lavapiés Jamal Zougam, uno de los marroquíes encarcelados por su presunta implicación en los atentados del pasado 11-M.
Según explicaron fuentes policiales, este locutorio, que tiene un precinto policial a su entrada, ha sido asaltado ya en cuatro ocasiones. El último de estos hechos se produjo hace apenas 15 días.
Esta vez fue un vecino de la zona el que alertó a la Policía Municipal de que el local estaba de nuevo abierto. Una patrulla se personó en la zona y entró. Buscó por si aún había alguien y tras escudriñar por todos los rincones avisó a la Policía Nacional.Los agentes de este Cuerpo no se mostraron muy satisfechos de que hubieran accedido al local sin esperar a que llegaran ellos.Apuntaron la posibilidad de que hubieran destruido alguna huella de los allanadores.
En otras de las ocasiones, los vecinos alertaron rápidamente, lo que permitió que la Policía Nacional llegara en el momento en el que uno de los que estaban dentro, un marroquí, abandonaba el recinto. Fue puesto en manos de la Comisaría General de Información, que es la encargada de dirigir las pesquisas sobre los atentados, quien descartó que estuviera relacionado con los atentados de Madrid.
Este periódico ha podido saber que en el dispositivo de búsqueda de los terroristas en la zona sur de Madrid la Policía localizó, en las localidades del sur, más de 80 viviendas habitadas por ciudadanos árabes con ideas radicales. En muchas de estas viviendas, los agentes que buscaban a los terroristas que posteriormente se suicidaron vieron muchos póster con la imagen de Bin Laden.En alguna de ellas, incluso, había carteles con la imagen de los aviones impactando en las Torres Gemelas, rodeados de velas encendidas. Esos datos fueron debidamente archivados por los agentes.
Según explicaron fuentes policiales, este locutorio, que tiene un precinto policial a su entrada, ha sido asaltado ya en cuatro ocasiones. El último de estos hechos se produjo hace apenas 15 días.
Esta vez fue un vecino de la zona el que alertó a la Policía Municipal de que el local estaba de nuevo abierto. Una patrulla se personó en la zona y entró. Buscó por si aún había alguien y tras escudriñar por todos los rincones avisó a la Policía Nacional.Los agentes de este Cuerpo no se mostraron muy satisfechos de que hubieran accedido al local sin esperar a que llegaran ellos.Apuntaron la posibilidad de que hubieran destruido alguna huella de los allanadores.
En otras de las ocasiones, los vecinos alertaron rápidamente, lo que permitió que la Policía Nacional llegara en el momento en el que uno de los que estaban dentro, un marroquí, abandonaba el recinto. Fue puesto en manos de la Comisaría General de Información, que es la encargada de dirigir las pesquisas sobre los atentados, quien descartó que estuviera relacionado con los atentados de Madrid.
Este periódico ha podido saber que en el dispositivo de búsqueda de los terroristas en la zona sur de Madrid la Policía localizó, en las localidades del sur, más de 80 viviendas habitadas por ciudadanos árabes con ideas radicales. En muchas de estas viviendas, los agentes que buscaban a los terroristas que posteriormente se suicidaron vieron muchos póster con la imagen de Bin Laden.En alguna de ellas, incluso, había carteles con la imagen de los aviones impactando en las Torres Gemelas, rodeados de velas encendidas. Esos datos fueron debidamente archivados por los agentes.
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