La sede del PP de Guecho amanece con pintadas amenazantes
23-07-06
La sede del PP de Guecho amanece con pintadas amenazantes
La frase, «un 'pepero' muerto, un 'euskaldún' contento», es el tercer acto de 'kale borroka'
LEYRE IGLESIAS
La sede del PP de Guecho amanece con pintadas amenazantes
La frase, «un 'pepero' muerto, un 'euskaldún' contento», es el tercer acto de 'kale borroka'
BILBAO.- La persiana de la sede que el PP vasco tiene en Guecho (Vizcaya) amaneció ayer con la huella del tercer ataque sufrido esta semana, en medio del llamado proceso de paz. Esta vez no fueron sólo pedradas a la cámara que está situada en el exterior de la oficina, ni tampoco peces muertos colocados delante de la puerta. En esta ocasión se trató de una pintada que decía: «Un pepero muerto, un euskaldun contento».
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La portavoz popular en el municipio guechotarra, Marisa Arrúe, aseguró que la pintada aparecida es «la gota de agua que colma el vaso». Por un lado, se trata de «la tercera acción de kale borroka» en una semana contra la sede de esta formación, pero además constituye a su juicio «una amenaza explícita contra la vida de los miembros de un partido demócrata». «Lo de hoy es algo más que los asaltos anteriores», precisó Arrúe, «es una amenaza más directa que nos ha asustado mucho».
La cámara de seguridad que pudo haber grabado a los atacantes apareció destrozada, al igual que ocurrió el pasado jueves, cuando un grupo de desconocidos apedreó el aparato.
Marisa Arrúe denunció que esta sucesión de asaltos demuestra que, «por mucho que algunos insistan en hablar de nuevos aires en el País Vasco, nada ha cambiado, y el ambiente sigue estando contaminado por actos como estos y quienes los realizan». En este periodo que el Gobierno cree «idóneo» para conseguir la paz, «muchos seguimos amenazados». Por ello, para la portavoz popular «es momento de reconsiderar la negociación» hasta que no se cumplan las condiciones necesarias, entre ellas el cese de la intimidación.
El PP realiza en Guecho una férrea oposición al actual alcalde del municipio, el peneuvista Iñaki Zarraoa, con el que ha protagonizado importantes desencuentros. Pero la popular Arrúe entiende que la reiterada agresión a su sede «va más allá» de esto. «La frase que han pintado en nuestra fachada viene a reivindicar que el mundo de los violentos está resurgiendo cada vez más». Según afirmó en declaraciones a este diario, la kale borroka está aumentando de nuevo, lo que supone «una vuelta atrás, a hace tres años».
«Mientras unos defienden el diálogo a toda costa, mirando para otro lado e ignorando las extorsiones y la acciones violentas, otros nos negamos a ceder ante las exigencias de los terroristas y sus métodos, y seguiremos denunciando todas sus coacciones y amenazas con el fin de impedir que se engañe a la sociedad vasca con falsas promesas», señaló.
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La portavoz popular en el municipio guechotarra, Marisa Arrúe, aseguró que la pintada aparecida es «la gota de agua que colma el vaso». Por un lado, se trata de «la tercera acción de kale borroka» en una semana contra la sede de esta formación, pero además constituye a su juicio «una amenaza explícita contra la vida de los miembros de un partido demócrata». «Lo de hoy es algo más que los asaltos anteriores», precisó Arrúe, «es una amenaza más directa que nos ha asustado mucho».
La cámara de seguridad que pudo haber grabado a los atacantes apareció destrozada, al igual que ocurrió el pasado jueves, cuando un grupo de desconocidos apedreó el aparato.
Marisa Arrúe denunció que esta sucesión de asaltos demuestra que, «por mucho que algunos insistan en hablar de nuevos aires en el País Vasco, nada ha cambiado, y el ambiente sigue estando contaminado por actos como estos y quienes los realizan». En este periodo que el Gobierno cree «idóneo» para conseguir la paz, «muchos seguimos amenazados». Por ello, para la portavoz popular «es momento de reconsiderar la negociación» hasta que no se cumplan las condiciones necesarias, entre ellas el cese de la intimidación.
El PP realiza en Guecho una férrea oposición al actual alcalde del municipio, el peneuvista Iñaki Zarraoa, con el que ha protagonizado importantes desencuentros. Pero la popular Arrúe entiende que la reiterada agresión a su sede «va más allá» de esto. «La frase que han pintado en nuestra fachada viene a reivindicar que el mundo de los violentos está resurgiendo cada vez más». Según afirmó en declaraciones a este diario, la kale borroka está aumentando de nuevo, lo que supone «una vuelta atrás, a hace tres años».
«Mientras unos defienden el diálogo a toda costa, mirando para otro lado e ignorando las extorsiones y la acciones violentas, otros nos negamos a ceder ante las exigencias de los terroristas y sus métodos, y seguiremos denunciando todas sus coacciones y amenazas con el fin de impedir que se engañe a la sociedad vasca con falsas promesas», señaló.
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