Rajoy: «Zapatero ha organizado una cruzada tercermundista contra Israel»
23-07-06
POLITICA EXTERIOR / Reprocha al presidente del Gobierno que haya «tirado por la borda» el crédito internacional de España / «Se está haciendo una política de gente estrafalaria y de 'progres' antiguos», añade el líder 'popular'
Rajoy: «Zapatero ha organizado una cruzada tercermundista contra Israel»
«Se está haciendo una política de gente estrafalaria y de progres de pacotilla»
MARIA JESUS MOLINA. Especial para EL MUNDO
SANTANDER.- Mariano Rajoy volvió a arremeter ayer contra el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a quien acusó de comportarse como un «líder tercermundista» por sus recientes gestos y declaraciones en relación al conflicto de Oriente Próximo.
«En contra del criterio de la Unión Europea, la ONU y el sentido común, Zapatero no ha condenado todavía a los terroristas y ha emprendido una cruzada contra el Estado de Israel», denunció el presidente de los populares en el acto de clausura de la Escuela de Verano del PP que estos días se ha celebrado en Santander.
(.../...)
Especialmente crítico con la política exterior del Gobierno, Rajoy asemejó las iniciativas de Rodríguez Zapatero en el extranjero a las desarrolladas por Chávez, Castro o Morales, alejadas de las que caracterizan a «cualquier país civilizado».
Durante el acto celebrado en la capital cántabra, el líder de los populares mostró su rechazo ante «la política prejuiciosa y dogmática» con la que gobiernan los socialistas desde hace dos años. «En estos momentos se está haciendo una política de gente estrafalaria y de progres antiguos», denunció Mariano Rajoy, quien calificó de «gracieta de progre de pacotilla», que poco tiene que ver con los intereses nacionales, «el polémico gesto de Rodríguez Zapatero de acceder a ponerse el pañuelo palestino en el Festival Internacional de las Juventudes Socialistas.
«Estamos haciendo el ridículo y tirando por la borda nuestro crédito internacional», dijo Rajoy. «Ya no somos un país ni serio, ni respetado, ni confidente», puntualizó después de calificar de «grotesca, antigua y paleta» la manifestación que se celebró en Madrid el pasado jueves contra la acción militar israelí en el Líbano.
A la espera de la llegada del nuevo curso político, el presidente popular adelantó algunos de los objetivos que centrarán la política de su partido después del verano, entre los que destaca la petición de un Pleno Extraordinario en el Congreso para el próximo mes de septiembre donde el Gobierno -«instalado en la aldeanada»- deberá explicar «cómo va a proceder tras la demolición del Estado que él mismo ha promovido», tras la aprobación del Estatuto de Autonomía de Cataluña.
Pero no sólo eso, Mariano Rajoy también anticipó que la próxima semana recurrirá ante el Tribunal Constitucional el nuevo Estatuto catalán, aprobado el pasado mes de junio, que ha convertido el Estado español «en un Estado confederal».
«Con una enorme irresponsabilidad, el Gobierno actual ha liquidado de repente el modelo autonómico, que todos votamos en 1978, y el cuerpo legislativo español». Un proceso «enormemente complejo», que condicionará la política de nuestro país «durante los próximos años», advirtió el líder popular.
«Zapatero no se ha percatado de que, para que pueda entrar en vigor el Estatuto de Cataluña, requerirá de la reforma de más de 30 leyes aprobadas por las Cortes Generales en su momento», añadió. Entre los postulados pendientes de ser revisados, se encuentran la Ley Orgánica del Poder Judicial, la de Financiación de las Comunidades Autónomas, la del Consejo Económico y Social, la del Banco de España, la del Tribunal de Cuentas, la del Catastro y la de Puertos... Normativas que de modificarse, por otra parte, «llevarán a España a un modelo de Estado inviable que caminará en la dirección contraria a Europa».
Sin embargo, lo más grave para el presidente del principal partido de la oposición es que el modelo español haya sido modificado por el 35% de los votos de una comunidad autónoma que «ha dicho qué es España», cuando «España sólo puede ser definido desde el consenso de todos los españoles».
Un proceso, que según Rajoy, es «imposible» con Zapatero, debido a que el líder del PSOE «ha roto por primera vez ese consenso y tiene como principal objetivo quitarle competencias al Estado».
«Dentro de poco, España tendrá que fijar las nuevas funciones, competencias y recursos del Estado, por lo que probablemente asistamos a un debate similar al que se ha producido en Alemania», advirtió Mariano Rajoy.
El Gobierno, según Rajoy, ha creado «problemas artificiales» y «líos donde no los había» cuando nadie se planteaba reformar la Constitución y los estatutos de autonomía, cuando nadie hablaba de la República, de la memoria histórica o de Franco y cuando todo «el mundo sabía lo que era España».
Rajoy también censuró el afán del Gobierno en la recuperación de la memoria histórica e ironizó que él no ha escuchado a los españoles hablar sobre «Felipe V, Wilfredo el Belloso, ni de la República ni de Franco».
Por eso, dijo, el PP se ocupa «sólo del futuro», porque «para el pasado ya están los historiadores, Zapatero y Carrillo», destacó.
Ante los dirigentes que han asistido a la Escuela de Verano, Rajoy presentó al PP como «el único partido nacional que existe hoy en España» y la única alternativa seria al Gobierno capaz de convertir España en «una nación única, donde todos los españoles sean iguales en derechos y obligaciones, y no se renuncie a la solidaridad entre territorios».
Rajoy se mostró convencido de que los populares ganarán tanto las elecciones autonómicas y municipales de 2007 como las próximas generales.
Rajoy: «Zapatero ha organizado una cruzada tercermundista contra Israel»
«Se está haciendo una política de gente estrafalaria y de progres de pacotilla»
MARIA JESUS MOLINA. Especial para EL MUNDO
SANTANDER.- Mariano Rajoy volvió a arremeter ayer contra el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a quien acusó de comportarse como un «líder tercermundista» por sus recientes gestos y declaraciones en relación al conflicto de Oriente Próximo.
«En contra del criterio de la Unión Europea, la ONU y el sentido común, Zapatero no ha condenado todavía a los terroristas y ha emprendido una cruzada contra el Estado de Israel», denunció el presidente de los populares en el acto de clausura de la Escuela de Verano del PP que estos días se ha celebrado en Santander.
(.../...)
Especialmente crítico con la política exterior del Gobierno, Rajoy asemejó las iniciativas de Rodríguez Zapatero en el extranjero a las desarrolladas por Chávez, Castro o Morales, alejadas de las que caracterizan a «cualquier país civilizado».
Durante el acto celebrado en la capital cántabra, el líder de los populares mostró su rechazo ante «la política prejuiciosa y dogmática» con la que gobiernan los socialistas desde hace dos años. «En estos momentos se está haciendo una política de gente estrafalaria y de progres antiguos», denunció Mariano Rajoy, quien calificó de «gracieta de progre de pacotilla», que poco tiene que ver con los intereses nacionales, «el polémico gesto de Rodríguez Zapatero de acceder a ponerse el pañuelo palestino en el Festival Internacional de las Juventudes Socialistas.
«Estamos haciendo el ridículo y tirando por la borda nuestro crédito internacional», dijo Rajoy. «Ya no somos un país ni serio, ni respetado, ni confidente», puntualizó después de calificar de «grotesca, antigua y paleta» la manifestación que se celebró en Madrid el pasado jueves contra la acción militar israelí en el Líbano.
A la espera de la llegada del nuevo curso político, el presidente popular adelantó algunos de los objetivos que centrarán la política de su partido después del verano, entre los que destaca la petición de un Pleno Extraordinario en el Congreso para el próximo mes de septiembre donde el Gobierno -«instalado en la aldeanada»- deberá explicar «cómo va a proceder tras la demolición del Estado que él mismo ha promovido», tras la aprobación del Estatuto de Autonomía de Cataluña.
Pero no sólo eso, Mariano Rajoy también anticipó que la próxima semana recurrirá ante el Tribunal Constitucional el nuevo Estatuto catalán, aprobado el pasado mes de junio, que ha convertido el Estado español «en un Estado confederal».
«Con una enorme irresponsabilidad, el Gobierno actual ha liquidado de repente el modelo autonómico, que todos votamos en 1978, y el cuerpo legislativo español». Un proceso «enormemente complejo», que condicionará la política de nuestro país «durante los próximos años», advirtió el líder popular.
«Zapatero no se ha percatado de que, para que pueda entrar en vigor el Estatuto de Cataluña, requerirá de la reforma de más de 30 leyes aprobadas por las Cortes Generales en su momento», añadió. Entre los postulados pendientes de ser revisados, se encuentran la Ley Orgánica del Poder Judicial, la de Financiación de las Comunidades Autónomas, la del Consejo Económico y Social, la del Banco de España, la del Tribunal de Cuentas, la del Catastro y la de Puertos... Normativas que de modificarse, por otra parte, «llevarán a España a un modelo de Estado inviable que caminará en la dirección contraria a Europa».
Sin embargo, lo más grave para el presidente del principal partido de la oposición es que el modelo español haya sido modificado por el 35% de los votos de una comunidad autónoma que «ha dicho qué es España», cuando «España sólo puede ser definido desde el consenso de todos los españoles».
Un proceso, que según Rajoy, es «imposible» con Zapatero, debido a que el líder del PSOE «ha roto por primera vez ese consenso y tiene como principal objetivo quitarle competencias al Estado».
«Dentro de poco, España tendrá que fijar las nuevas funciones, competencias y recursos del Estado, por lo que probablemente asistamos a un debate similar al que se ha producido en Alemania», advirtió Mariano Rajoy.
El Gobierno, según Rajoy, ha creado «problemas artificiales» y «líos donde no los había» cuando nadie se planteaba reformar la Constitución y los estatutos de autonomía, cuando nadie hablaba de la República, de la memoria histórica o de Franco y cuando todo «el mundo sabía lo que era España».
Rajoy también censuró el afán del Gobierno en la recuperación de la memoria histórica e ironizó que él no ha escuchado a los españoles hablar sobre «Felipe V, Wilfredo el Belloso, ni de la República ni de Franco».
Por eso, dijo, el PP se ocupa «sólo del futuro», porque «para el pasado ya están los historiadores, Zapatero y Carrillo», destacó.
Ante los dirigentes que han asistido a la Escuela de Verano, Rajoy presentó al PP como «el único partido nacional que existe hoy en España» y la única alternativa seria al Gobierno capaz de convertir España en «una nación única, donde todos los españoles sean iguales en derechos y obligaciones, y no se renuncie a la solidaridad entre territorios».
Rajoy se mostró convencido de que los populares ganarán tanto las elecciones autonómicas y municipales de 2007 como las próximas generales.
Comentarios