Un auto en 57 capítulos
12-04-06
11-M
Un auto en 57 capítulos
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Un auto en 57 capítulos
En 1.460 folios entregados a las partes en papel y en formato digital, el juez dictó ayer auto de procesamiento contra 29 imputados. Este es un amplio resumen del documento, punto por punto
Veinticinco meses después de que España sufriera el más sangriento atentado de la Historia de Europa, el juez de la Audiencia Nacional Juan del Olmo hizo público ayer el auto de procesamiento en el que inculpa por distintos delitos a 29 de los 116 imputados.El magistrado notificará la resolución a los afectados los próximos días 16, 17 y 18 de mayo. Contra el auto cabe recurso, con lo cual los imputados que finalmente no han sido procesados no quedarán exculpados hasta que la resolución sea firme. El auto de procesamiento no implica que la investigación sobre la matanza esté finalizada.Esto ocurrirá cuando se dicte el auto de conclusión del sumario, varios de cuyos tomos permanecen bajo secreto. El propio juez señala en su resolución que «el caudal de diligencias obliga y justifica la continuidad de la investigación».(.../...)
1 Y 2.- LOS ATENTADOS DEL 11-M. El juez relata cómo el 11 de marzo de 2004, jueves, se produjo una serie encadenada de explosiones en cuatro trenes de cercanías de Madrid que discurren por el llamado Corredor del Henares.
En sólo cuatro minutos, los transcurridos entre las 7.36 y las 7.40 horas de la mañana, se desató un infierno en el que 191 personas perdieron la vida y otras 1.755 resultaron heridas.El apartado 2 del auto refleja el nombre de todas y cada una de esas personas.
En todos los trenes había cuatro bombas, excepto en el de Santa Eugenia, donde había una. En total, estallaron 10 artefactos; otros dos fallaron y fueron explosionados de forma controlada en los andenes de las estaciones de Atocha y El Pozo.
La bomba número 13, procedente también del tren de El Pozo, fue desactivada en el Parque Azorín, próximo a la comisaría de Puente de Vallecas.
3.- ACTUACIONES INICIALES. El auto detalla las primeras actuaciones de la Policía y de los Tedax en los escenarios de los atentados.
El instructor se refiere extensamente al recorrido de la bolsa-bomba que se encontraba en el tren de la estación de El Pozo, una prueba esencial del procedimiento, porque a partir de ella se empezó a descubrir la trama de los autores materiales de la masacre.
Del Olmo transcribe las declaraciones judiciales de todos los agentes que intervinieron en el transporte de esa bolsa y del resto de los objetos hallados en el citado tren. Todo ello fue introducido en grandes envoltorios de plástico que fueron llevados en furgonetas policiales a dos comisarías donde no los recepcionaron.De ahí fueron al pabellón de Ifema y, finalmente, a la comisaría del distrito de Puente de Vallecas.
En la madrugada del 12 de marzo, una policía a la que, junto a otro compañero, se había encomendado la catalogación de los objetos descubrió la bolsa-bomba, que fue desactivada en el cercano Parque Azorín.
Dos de los policías que intervinieron en el azaroso traslado de los objetos hallados en la estación de El Pozo declararon ante el juez instructor el 1 de julio de 2004. Uno de ellos relató que cuando llegaron a Ifema se entrevistó con un responsable de la Unidad de Intervención Policial (UIP), que les indicó el lugar donde debían dejar las bolsas, con una anotación sobre su procedencia.
El agente añadió que cuando volvían de camino a la comisaría recibieron la indicación de la juez de guardia de recuperar las bolsas y trasladarlas a Puente de Vallecas. Volvieron al recinto ferial y «al llegar al Pabellón 6 le dijo al responsable policial que tenía que retirar los efectos, pero éste no le dio el consentimiento, con lo que tuvo que hacer gestiones con su comisario para que les dieran permiso».
Después de que, el pasado mes de marzo, EL MUNDO difundiera el informe-instancia elaborado en octubre de 2004 por el inspector jefe Alvarez, encargado de la custodia de los objetos recogidos en el tren que estalló en El Pozo, Del Olmo decidió tomar declaración al resto de los policías que participaron en el traslado.
A excepción de los agentes que manifestaron no recordar con exactitud el recorrido de las bolsas, dado el tiempo transcurrido, la mayoría de ellos manifestó que las bolsas de plástico que albergaron los objetos «estaban cerradas» al ser introducidas en los furgones policiales sin que pudiera verse lo que había dentro.
Otro agente que participó en el transporte desde Ifema a la comisaría de Puente de Vallecas declaró que «llegan a Ifema y vio que había bolsas en el mismo pabellón de los cadáveres, pero apartadas y separadas de todo, custodiadas por gente de la UIP».
Este funcionario dijo que «está seguro de que las bolsas estaban todas cerradas, pero no recuerda si tenían precinto, nudo o de qué forma estaban cerradas». «Olían a chamuscado y sonaban móviles dentro de ellas», añadió.
Un policía más incorporó el dato de que, al llegar a Ifema con las bolsas procedentes de El Pozo, la Policía Científica les dio cinta para que acotaran la zona. Al volver al Pabellón 6 para recoger los envoltorios y trasladarlos a Puente de Vallecas, «una persona uniformada les preguntó a dónde se dirigían y, aunque íbamos en vehículos oficiales, hubo control de acceso».
«Las bolsas que recogimos estaban tal cual las dejamos», manifestó otro agente. Agregó que «no vio ninguna rota ni abierta», aunque tampoco recuerda de qué forma estaban cerradas. Sólo uno de los policías recordó que las bolsas estaban cerradas «con un nudo normal, no iban precintadas», y dijo que él no vio ninguna abierta o rota.
El juez De Olmo cree a pies juntillas a los policías que participaron en el traslado de los efectos y minusvalora el testimonio del inspector, «quien en ningún momento ha afirmado que viera todos los efectos recogidos» en El Pozo y que, «días después, tras ver los medios de comunicación, cree reconocer la bolsa que es expuesta en dichos medios como la que contenía el artefacto desactivado en el Parque Azorín, extremo que no recoge en su instancia de 25 de octubre de 2004».
«Quienes sí identifican la bolsa que contenía el artefacto explosivo, por ser ellos quienes la localizan en la comisaría de Puente de Vallecas, son los dos agentes que estaban realizando la apertura de los bolsones y el recuento de los efectos que contenían», precisa el juez. También resalta que todos los agentes afirman haber visto los envoltorios cerrados y aseguran haberlos recogido en Ifema en idénticas condiciones que tenían cuando los dejaron allí. «Cuando fueron a recogerlos, hubo de intervenir el comisario de su comisaría para que les permitieran recogerlos, lo que es expresivo de un control real de los efectos allí depositados», opina el magistrado.
«Si los efectos fueron recogidos bajo control y supervisión policial en la estación de El Pozo; se introdujeron bajo esa misma supervisión en bolsones que fueron cerrados, y dichos bolsones se trasladaron en todo momento por efectivos policiales uniformados a recintos bajo control policial, la custodia policial en todo momento garantizó con idéntica calidad de origen esos bolsones», concluye el instructor, para el que «la cadena de custodia [está] no sólo aclarada y precisada, sino preservada».
4.- INFORME POLICIA-GUARDIA CIVIL DEL 24 DE JUNIO DE 2005. El informe pericial emitido conjuntamente por la Policía y la Guardia Civil el 24 de junio de 2005 aclara, entre otros extremos, lo siguiente:
- El peso de la carga explosiva del artefacto que apareció en el primer vagón del tren de la estación de Atocha era de unos 10 kilos de dinamita. «Estos datos coinciden con los del artefacto neutralizado en la estación de El Pozo y el desactivado en la comisaría de Vallecas».
- Los efectos de la explosión controlada del artefacto encontrado en Atocha fueron «similares» a los producidos por las restantes explosiones registradas el 11 de marzo.
- El resultado de los análisis químicos indicó la presencia de dinamita en todos los focos, salvo en el vagón 4 del tren que estalló a la altura de la calle de Téllez y el vagón 5 del tren de El Pozo, «donde no se detectaron sustancias relacionadas con explosivos, si bien los efectos producidos en los dos focos fueron de las mismas características que los ocasionados por la dinamita en las demás explosiones».
- El análisis de la bolsa desactivada en el Parque Azorín determinó que se trataba de dinamita Goma 2 Eco. Esta misma sustancia es la que se encontró en el piso de Leganés donde se suicidaron siete islamistas.
- «Los artefactos que explosionaron en los trenes el 11 de marzo, en términos generales, fueron de tipo similar al desactivado en la comisaría de Vallecas (...). Se trató de artefactos de activación temporizada, con la misma hora programada para su activación, si bien sólo se llegaron a identificar dos teléfonos móviles» (el de la bolsa-bomba de Vallecas y el de la mochila explosionada de forma controlada en el andén de la estación de El Pozo).
5.- LA ROPA HALLADA CERCA DE LA ESTACION DE VICALVARO. El mismo día de los atentados, sobre el mediodía, la Guardia Civil recibió una llamada en la que un testigo comunicaba que sobre las 7.45 horas, en la Gran Vía del Este, próxima a la estación de tren de Vicálvaro (cercana a Santa Eugenia y a El Pozo), una persona se metió en una obra, se quitó el pantalón y la sudadera que llevaba y dejó estas prendas debajo de una caseta. A continuación, se marchó.
Esas prendas fueron recogidas y sometidas a un análisis de muestras biológicas, del que resultó que contenían perfiles genéticos de Asrih Rifaat Anouar, Abdennabi Kounjaa, Mohamed Oulad Akcha y Otman el Gnaoui. Los tres primeros se suicidaron el 3 de abril siguiente en el piso de Leganés en el que los presuntos autores materiales de los atentados estaban cercados por la Policía.El Gnaoui fue detenido y se encuentra en prisión.
6.- VESTIGIOS RELACIONADOS CON LOS EXPLOSIVOS. Tras el estudio de la ubicación de los artefactos en los trenes, se concluye que:
- Los terroristas colocaron el explosivo en el centro de cada uno de los vagones, salvo en el vagón 6 del tren de la calle de Téllez y el vagón 4 del tren de El Pozo.
- En los trenes de Atocha y Téllez, los artefactos estuvieron colocados en los mismos vagones (1, 4, 5 y 6).
- No es posible ubicar con exactitud en qué vagones se encontraban los dos artefactos del tren de El Pozo que no explosionaron.
Respecto a la utilización de metralla, se ha concluido que el artefacto desactivado en el Parque Azorín llevaba embutidos 640 gramos de clavos y tornillos y que, «en las distintas explosiones producidas en los cuatro trenes, se recogieron evidencias de que los artefactos también disponían de metralla», presentando «coincidencias» con los clavos y tornillos recuperados en el Parque Azorín. En cambio, no existen esas coincidencias en la metralla encontrada en el piso de Leganés.
También se afirma que «se han encontrado detonadores en todos los escenarios, que siempre han sido eléctricos» y, «en todos los casos», el explosivo recuperado ha sido dinamita Goma 2 Eco, «salvo en el registro de la finca de Chinchón [Morata], donde las analíticas realizadas sólo pudieron determinar la presencia genérica de dinamita».
En relación al uso de teléfonos móviles, el aparato que llevaba la bomba desactivada en el Parque Azorín «presentaba las modificaciones necesarias para ser utilizado como sistema de activación». No presentaban modificación alguna los teléfonos hallados en el piso de Leganés, «si bien, como quiera que las manipulaciones realizadas al teléfono del artefacto desactivado fueron bastante simples, cualquier teléfono móvil podría ser potencialmente utilizado para activar un artefacto», indica un informe policial reproducido por Del Olmo.
Otra coincidencia significativa es que en el piso de Leganés se recuperaron restos de un carrete de cable de audio de las mismas características que el cable empleado en el artefacto colocado el 2 de abril de 2004 en la vía del tren AVE, a la altura de Mocejón (Toledo).
Se resalta, igualmente, la presencia del mismo tipo de bolsas de basura -utilizadas para introducir el explosivo- en el artefacto del Parque Azorín, en la furgoneta encontrada en Alcalá de Henares y en el piso de Leganés.
7.- LA FURGONETA KANGOO. El auto de procesamiento reproduce informes policiales en los que se afirma que en la furgoneta Kangoo abandonada por los terroristas en las cercanías de la estación de tren de Alcalá de Henares aparecieron restos de un explosivo con la misma composición química (entre otros elementos, aparecía metenamina) que tenía el explosivo desactivado en el Parque Azorín. Dio el mismo resultado el análisis de una muestra-patrón de dinamita Goma 2 Eco, «todo lo cual viene a determinar que se utilizó el mismo explosivo».
En la furgoneta aparecieron detonadores de características similares a las de las bombas desactivadas y que coinciden con los suministrados a la empresa Caolines de Merillés, propietaria de Mina Conchita.
8.- EL ARTEFACTO DEL AVE. El 2 de abril de 2004 se encontró un artilugio explosivo adherido a la vía del tren AVE Madrid-Sevilla, en la zona de Mocejón (Toledo). Estaba compuesto por Goma 2 Eco, sustancia que también apareció en el piso de Leganés.
9 Y 10.- EL DESESCOMBRO DE LA VIVIENDA DE LEGANES. Siete presuntos terroristas (Tachid Oulad Akcha, Asrih Rifaat Anouar, Sarhane ben Abdelmajid Fakhet, Jamal Ahmidan, Mohamed Oulad Akcha, Allekema Lamari, Abdennabi Kounjaa) se suicidaron en el número 40 de la calle de Carmen Martín Gaite el 3 de abril de 2004, cuando estaban cercados por fuerzas policiales. Sus identidades han podido ser establecidas por el análisis de ADN de las muestras orgánicas halladas tras la explosión, en la que murió el policía Francisco Javier Torronteras.
La Policía estima que los terroristas utilizaron unos 30 kilos de Goma 2 Eco para suicidarse. Además, se recuperó un total de 17,431 kilos de esa dinamita, que es «de las mismas características» a la utilizada para confeccionar el artefacto desactivado en el Parque Azorín.
11.- LA PARCELA DE MORATA. Las investigaciones para localizar el lugar donde pudieron activarse las tarjetas telefónicas utilizadas en los artefactos explosivos condujeron a una finca alquilada por Jamal Ahmidan en el polígono 44 de Chinchón, cerca de la población de Morata de Tajuña.
En este lugar fueron halladas 97 huellas lofoscópicas, entre ellas las de los hermanos Ahmidan; la de Abdelmajid Bouchar (que escapó del piso de Leganés, siendo luego detenido), y la de tres de los suicidas de Leganés (Kounjaa, Sarhane Ben Abdelmajid Fakhet y el propio Jamal Ahmidan).
12.- EL SKODA. El coche Skoda Fabia 3093 CKF fue localizado el 13 de junio de 2004 en la calle Infantado de la localidad de Alcalá de Henares, a escasos metros del lugar donde fue encontrada el 11-M la furgoneta Kangoo.
El auto recoge la declaración de la persona que robó el vehículo en Benidorm y lo vendió a Sarhane, El Tunecino. También refleja las multas que el coche recibió antes de las Navidades de 2003 por estar mal aparcado en la Avenida de Bruselas, próxima a la casa de El Tunecino.
No obstante, el juez no aclara por qué la presencia de este coche en Alcalá de Henares, cerca de la Kangoo, no fue detectada por la Policía.
13.- ANALISIS DE MUESTRAS TOMADAS EN ASTURIAS. La Guardia Civil ha comparado la tierra de la Mina Conchita con muestras de tierra de zapatos utilizados por José Emilio Suárez Trashorras. Los resultados no son concluyentes.
14.- LA VIVIENDA DE ALBOLOTE. También ha sido investigada una casa alquilada por Asrih Rifaat Anouar en Albolote (Granada) el 6 de marzo de 2004.
15.- LOS EFECTOS HALLADOS EN UNA BOLSA DE SAED EL HARRAK. El Harrak, detenido el 10 de mayo de 2004, trabajaba en una empresa de construcción cuyo propietario entregó a la Policía una bolsa con efectos de su empleado. Entre ellos figuraban tres cuartillas manuscritas en árabe. Su análisis ha permitido comprobar que el escrito pertenece al suicida Kounjaa y que se trata de una especie de testamento.
16 Y 17.- HUELLAS EN LIBROS APARECIDOS EN LEGANES. El juez ha ordenado analizar las huellas aparecidas en libros religiosos encontrados en el piso en el que los siete terroristas se suicidaron y las huellas encontradas en otros objetos, como bolsas de plástico o vehículos. Ello ha permitido situar a las mismas personas en diversos escenarios relacionados con la trama terrorista. Así, huellas de Bouchar han aparecido en el piso de Leganés y también en la casa de Morata.
18.- LOS VEHICULOS. El auto hace referencia a los vehículos utilizados por los terroristas y por otros implicados, como Suárez Trashorras.
El juez parece sostener que el explosivo de Asturias fue trasladado a Madrid en el Volkswagen Golf de Ahmidan, El Chino, cuyo maletero tenía capacidad para transportar 210 kilos de dinamita.
En el maletero de ese coche fue encontrado nitroglicol, sustancia que se ha hallado en la dinamita de los trenes.
19 y 20.- TEXTOS MANUSCRITOS Y DOCUMENTOS OFICIALES. El auto indica que se han analizado los documentos manuscritos hallados en los domicilios de los implicados, cuya autoría, en algunos casos, no ha podido determinarse.
También se ha analizado la autenticidad de numerosos documentos oficiales, como carnés de conducir y pasaportes.
21 Y 22.- REGISTROS EN EL CERRO DE LOS ANGELES Y VILLALOBOS.El primer piso era la vivienda de los hermanos de El Chino y el segundo era la casa del propio Jamal Ahmidan.
23 Y 24.- LAS CINTAS. La Policía ha analizado la cinta de vídeo en la que se reivindicó el atentado, encontrada en una papelera cerca de la M-30, y otra cinta videográfica hallada en el piso de Leganés. Ha concluido que «no existen diferencias sustanciales» ni respecto a las personas que aparecen ni respecto al armamento que exhiben.
25.- ANALISIS DE LA TELA VERDE. Una tela rectangular de color verde y con inscripciones en árabe fue recuperada en la vivienda de Leganés. La Policía ha concluido que es la misma que aparece en el vídeo de reivindicación del atentado.
26.- QUIEN LEYO EL COMUNICADO. El juez asume la tesis policial de que el terrorista que leyó el comunicado de reivindicación del atentado fue El Chino, para lo que se basa en reconocimientos de voz realizados por cuatro testigos.
27.- LA REIVINDICACION. El auto reproduce el comunicado leído en la cinta que apareció en las proximidades de la mezquita de la M-30.
Esa cinta «era de las mismas características que la comprada el 8 de marzo de 2004 por dos varones en el Bazar Top». El juez no identifica a estos individuos.
28 Y 29.- ADN. Una parte sustancial de la investigación se basa en los perfiles genéticos determinados gracias a las muestras orgánicas recogidas en los diferentes escenarios. Del Olmo admite que varias de ellas no han podido identificarse.
30.- ORIGEN DE DETONADORES Y EXPLOSIVOS. Los informes aportados por los Cuerpos policiales determinan que el tipo de detonadores de aluminio localizados «se sirve exclusivamente a la empresa Caolines del Merillés en la Península y se utiliza únicamente en las dos explotaciones de esta empresa: Mina Conchita y Mina Collada».
Para determinar la procedencia fue clave la intervención directa del comisario jefe de la Unidad Central de Desactivación de Explosivos: «Por gestiones realizadas personalmente por el comisario jefe de esta unidad, se ha podido determinar en un alto porcentaje de acierto que los detonadores utilizados el 11-M proceden de las canteras Caolines de Merillés. Los mismos pertenecen a la última remesa de febrero del presente año».
31.- SOPORTES INFORMATICOS RECUPERADOS. El magistrado describe el contenido de los discos duros y del resto del material informático intervenido durante las diferentes operaciones policiales. Así, detalla el contenido del ordenador interceptado en la vivienda habitual de El Chino. Además, se recompone el historial de las páginas de Internet visitadas desde ese ordenador. Entre otras, «enlaces sobre victimario musulmán en Palestina, Irak, Chechenia y Afganistán». Y recoge un documento en el que se explica la manera de actuar de las guerrillas, se aportan datos operativos de las armas ligeras y se dicta una serie de recomendaciones para trabajar en grupo: «Grupo del trabajo clandestino». Y divide: «Grupos de liderazgo, grupo de reunir las informaciones, grupo de proveer y grupo de ejecución». Entre el material había fotografías de los atentados de Madrid. También figura un mensaje de las Brigadas de Abu Hafs al Masri, de 15 de marzo de 2004.
El juez también incluye el análisis del disco duro del ordenador de Leganés. Hay abundantes ficheros de contenido doctrinal. También hay documentos de carácter proselitista yihadista. Hay una parte en el disco duro de carácter operativo-militar en la que aparecen, entre otros ficheros, grabaciones de atentados con bomba de la insurgencia iraquí contra EEUU.
En esta terminal también se han encontrado manuales sobre la «guerra de guerrillas», otro manual sobre el uso de pistola con silenciador y una enciclopedia de armas de guerra y dibujos con la composición de artefactos explosivos. En el auto se incluye el análisis realizado a los puertos USB intervenidos en Leganés.Uno de los documentos se titula La preparación para la Yihad y se destaca «la importancia del entrenamiento militar para los musulmanes». Se indica también que se accedió a páginas de Internet para buscar información precisa de varias sinagogas repartidas por España.
32.- ANALISIS DE DOCUMENTACION INFORMATICA. El juez detalla los informes periciales de la Unidad Central de Información sobre la reconstrucción del material informático recuperado tras la explosión del piso de Leganés. De nuevo localizan croquis sobre cómo fabricar artefactos explosivos. También figuran numerosas direcciones de Internet donde se analiza el terrorismo internacional y la yihad. Uno de los documentos recuperados se refiere a los teléfonos móviles. «Se hace un profundo y preciso análisis de las características del sistema de telefonía, de las posibilidades que brinda a la investigación policial, de los riesgos del uso de la telefonía móvil y de las terminales telefónicas, las tarjetas, así como de las cautelas que deben adoptarse», indica el informe policial del contenido del material informático de los terroristas.En otro archivo se detallan los métodos para ocultar y camuflar explosivos. Se explica también cómo fabricar dinamita, entre otros componentes explosivos.
33.- OTROS SOPORTES. El juez incluye otros documentos intervenidos por la Policía, además de en el piso de Leganés, en otros domicilios de Madrid utilizados por los terroristas. En la vivienda de Carmen Martín Gaite se localizó información sobre fincas judías (fundamentalmente en Madrid y Avila) susceptibles de convertirse en objetivo de los islamistas.
34.- LOS DOCUMENTOS DE GLOBAL ISLAMIC MEDIA. Tras los atentados, la Policía también navegó por Internet. En la web de un instituto noruego que investiga el islamismo halló un escrito extraído de la web Global Islamic Media. «Mensaje al pueblo español», comenzaba el escrito, que añadía: «Decimos que para forzar al Gobierno español a la retirada de Irak, la resistencia debe propinar golpes dolorosos a sus tropas, y que eso se vea acompañado de un seguimiento informativo que aclare la verdad de la situación dentro de Irak. Debe aprovecharse al máximo la proximidad de la fecha de las elecciones generales en España en el tercer mes del año próximo (marzo 2004)».
«Creemos que el Gobierno español no soportará más de dos o tres golpes, como máximo, antes de verse obligado a retirarse por la presión popular. Si sus tropas permanecen tras estos golpes, la victoria del Partido Socialista estará probablemente garantizada (ver porcentajes), y la retirada de las tropas españolas estará en la lista de su proyecto electoral».
«Por último, insistimos en que la retirada de las fuerzas españolas o italianas de Irak supondrá una presión enorme para la presencia británica, que tal vez Tony Blair no podría soportar».
«De este modo caerán las piezas de dominó rápidamente, pero permanecerá el problema principal de la caída de la primera ficha».
35.- MENSAJE DE BIN LADEN DE ABRIL DE 2004. El líder de Al Qaeda afirma: «Os quiero comunicar que 'vuestra mercancía os ha sido devuelta' a través de lo que ocurrió el 11 de Septiembre y el 11 de Marzo». «La verdadera justicia es la reciprocidad», añade, para, a continuación, hacer una oferta: «Les planteo una iniciativa de paz que consiste en que nos comprometemos a cesar las operaciones contra todos los países que prometan no agredir a los musulmanes o interferir en sus asuntos, incluyendo el que no forme parte del complot estadounidense contra el mundo islámico (...). Cesad de derramar nuestra sangre y de esa forma vosotros os ahorraréis la vuestra (...). Matar a los rusos fue consecuencia de su invasión de Afganistán y Chechenia y matar a los europeos fue consecuencia de la invasión de Irak y Afganistán, y lo mismo contra los americanos en Nueva York».
36.- INFORMACIONES PREVIAS AL 11-M SOBRE CASABLANCA. Fueron remitidas a Del Olmo por el Juzgado número 5 de la Audiencia Nacional, en el que Baltasar Garzón ya investigaba la trama de ese atentado, que tuvo lugar en mayo de 2003. El informe, elaborado tres meses antes del 11-M, ya incluía los nombres de dos figuras centrales de los atentados de Madrid: Jamal Zougam y El Tunecino.
37.- TELEFONO Y TARJETA DE LA MOCHILA BOMBA DE VALLECAS. Este apartado incluye uno de los aspectos que aún no ha sido aclarado en la trama terrorista: la identidad de quienes compraron días antes de los atentados varios teléfonos móviles que fueron empleados por la célula de El Chino y El Tunecino. El juez recoge el relato de quien vendió los terminales, que no ha sido procesado: «Que el día 3 de marzo he vendido tres teléfonos sin liberar marca Mitsubishi Trium T110. (...) El comprador era un hombre normal, pelo liso, bien peinado, que medía aproximadamente 1,75 o algo más. De unos 25 o 30 años, más de 30, no. Era joven, era delgado, sin barba ni bigote, su tez era ni blanco ni demasiado moreno [sic], era moreno pero más blanco que los de raza hindú. No llevaba gafas, no tenía nada en la cara que le llamara la atención, era una cara normal, las cejas no eran demasiado pobladas, eran normales, la frente también era normal, su cara era normal. Entre el declarante y el cliente hablaron en español, el cliente era extranjero y me dijo que era de Bulgaria (...). El día 3 por la tarde el cliente manifestó que quería seis terminales más iguales (...). Fue acompañado de otra persona, que era de características normales. La altura entre ellos era casi la misma, las paletas las tiene un poquito separadas, poco pelo delante y el restante cortado normal, y más o menos de la misma edad que el otro. Y se dirige al declarante en español, pero considero que era extranjero, no español. Mientras yo apuntaba el IMEI en mi libro entre ellos hablaban en extranjero y les pregunté de dónde eran y me dijo uno de ellos que eran búlgaros (...). El día 8 de marzo vino el chico que había venido por primera vez el día 4, y compró otro teléfono Trium T110 (...).Compró también un reloj Casio de muñeca con cadena metálica, digital. Una cinta de cámara de vídeo digital DVM».
38.- LAS BOMBAS, EN MORATA. «Los datos de activación de la tarjeta, en combinación con el viaje que se estaba realizando la noche del 9 de marzo de 2004 hacia Madrid de parte de los miembros de la presunta célula terrorista, permite considerar que las operaciones dirigidas a la preparación de los terminales telefónicos se efectuaron el día 10 de marzo de 2004 (y, presumiblemente, con luz suficiente -natural-, a fin de facilitar la labor y asegurar el objetivo)». Siete tarjetas telefónicas «fueron usadas para activar teléfonos móviles bajo el área de influencia de Morata de Tajuña, sin realizarse ninguna llamada; tal circunstancia, junto al hecho de que los siete IMEIS no se volvieron a registrar en el área de Amena, lleva a considerar que esas siete tarjetas podrían haber sido utilizadas para la confección y activación de los artefactos explosivos».
39.- LAS LLAMADAS. Analiza una gran cantidad de llamadas, incluidas las realizadas en los dos días previos al 11-M. Tanto al inicio como al final del informe, insiste en la importancia y fiabilidad de estos datos para la investigación: «De todo lo cual cabe inferir: vinculaciones entre los usuarios de tarjetas SIM y terminales telefónicos (identificados por su IMEI), traslados de personas de un lugar a otro (itinerarios, preguntas, lugares de contacto, reiteraciones de contacto -tanto físicos como por llamadas telefónicas-), precisiones que pueden fijarse a otros datos de la investigación (vestigios lofoscópicos y de ADN dejados en la finca de Albolote por personas distintas a quienes intervinieron en el alquiler, momento a partir del cual podrían haberse preparado los sistemas de activación de los artefactos explosivos, etcétera), confirmación de otros extremos obtenidos en el curso de la instrucción judicial (la información telefónica permite verificar declaraciones testificales, desvirtuar tesis exculpatorias, corroborar usos exclusivos del material telefónico identificado por parte de los presuntos miembros de la célula terrorista, etcétera)». «Es por ello que resulta necesario justificar la calidad de dicha información telefónica, y, en tal sentido, el informe emitido por dos peritos especialistas en telefonía móvil que a continuación se recoge».
40.- HABLAN LOS TECNICOS. Se trata de un informe pericial emitido por dos expertos en telecomunicaciones (telefonía móvil) que llegó a Del Olmo la semana pasada. En él responden a varias dudas técnicas que les había planteado la Policía.
41.- TODAS LAS LLAMADAS. Se trata de un extracto casi íntegro del informe llegado el 20 de febrero a la Audiencia Nacional con todas las llamadas del 11-M. Entre la ingente cantidad de información que ofrece aparece una llamada de atención por los contactos, aún no aclarados, entre Jamal Ahmidan, El Chino, y alguien «no identificado» de la prisión de A Lama (Pontevedra).La Policía explica al juez que considera estas llamadas «del máximo interés».
No son los únicos datos que faltan por completar. El informe también tiene pasajes como el que afirma: «Con respecto a esta última tarjeta no se ha podido determinar quién es el usuario».
42.- EL EXPLOSIVO, DIA A DIA. La Guardia Civil ofrece un relato casi diario de las relaciones que mantuvieron los miembros de la trama asturiana con el grupo de Jamal. Comienza con un viaje a Madrid de Trashorras y Carmen Toro, donde se encuentran con El Chino. Concluye 155 folios después con una llamada de Antonio Toro el 19 de marzo a un comunicante «anónimo».
43.- HABLA EL CONFIDENTE. Este apartado recoge las conversaciones del confidente de la Guardia Civil Rafá Zouhier con Víctor -su controlador en la Guardia Civil- tras los atentados. El marroquí le ofrece datos de los implicados en la masacre. «¿Pero tú estás seguro de que ese tío [El Chino] tiene algo que ver?», le pregunta el agente. Rafá responde: «Eh, tronco, escúchame, tiene detonadores, tiene mandos a distancia, 300 metros, tiene Goma 2 (...). Teléfonos no he podido conseguir (...). Es bajito, metro setenta y pico, con los ojos así como... es moreno, así muy pequeño y muy delgado...Es un tío religiosísimo, un tío que reza mucho, está en la mezquita también los viernes, a lo mejor no va más...».
44.- OTROS TELEFONOS. Incluye cuatro informes relacionados con los teléfonos y tarjetas de crédito. Uno de ellos intenta reconstruir los desplazamientos de Trashorras. En el referido al viaje a Asturias para hacerse con la dinamita, por ejemplo, explica que hay datos de sobra para acreditar el viaje de El Chino, pero no así para asegurar, en base a las llamadas, que el suicida Kounjaa fuera uno de los que recogieran los explosivos de la mina.
45.- FINANCIACION Y OTRAS CUESTIONES RELACIONADAS. El magistrado calcula los costes económicos de la masacre y las vías de financiación de los terroristas. Salvo las armas y la documentación falsa, estima que los gastos generados por la adquisición de los explosivos (entre 31.875 y 45.000 euros), el alquiler de inmuebles, teléfonos y tarjetas SIM «suponen un coste total no inferior a 54.271, lo que, sumado a los 51.795 euros en metálico acumulados por los miembros de la célula para hacer frente a éstos y subsiguientes gastos, supondría una disponibilidad económica inmediata de no menos de 105.000 euros para financiar el conjunto de la operación».Los terroristas contaban, además, con reservas económicas, «en forma de hachís y MDMA», por valor de «entre 1.353.677 y 1.537.663 euros».
Aclara que se utilizó la «microfinanciación» para costear los atentados. Contaron con el tráfico de drogas para afrontar la mayor parte de los gastos, y con la comisión de otros delitos para proveerse directamente de utensilios necesarios para los atentados, como el robo de coches.
46.- CONSECUENCIA DE LOS CONTACTOS TELEFONICOS. Del Olmo detalla informes sobre seguimientos telefónicos a algunos de los más destacados implicados. Y cruza los datos de los números utilizados con los facilitados por testigos protegidos en la causa y que demuestran las relaciones que mantenían entre sí los ahora procesados.Fundamentalmente se sigue a El Chino y a El Tunecino, los más representativos de la célula autora de la masacre de Madrid.Se detallan estos seguimientos desde agosto de 2003 hasta noviembre de ese mismo año.
47.- ROBOS DE EXPLOSIVOS EN ASTURIAS Y TRASLADO A MADRID. El juez considera de «valor relativo» todos los informes policiales y testimonios de testigos sobre el tráfico de explosivos en Asturias denunciado en reiteradas ocasiones entre 2001 y 2003. Detalla «una serie de diligencias de valor relativo básicamente relacionada con un tiempo anterior a 2004, vinculadas a actividades de confidentes policiales y ámbito delincuencial». «El valor es relativo por cuanto se están refiriendo a presuntas actividades delictivas que no son objeto de esta instrucción judicial pero muestran una previa actividad delictiva presuntamente coincidente en lugar, personas y materia; lo que es de por sí expresivo de una preexistente capacidad de comisión delictiva a considerar». Así, explica la denominada operación Pipol, en la que se desmanteló la trama delictiva dirigida por José Emilio Suárez Trashorras y Antonio Toro Castro, a los que se les intervinieron explosivos. Añade numerosos informes de las unidades de la Guardia Civil y de la Policía Nacional que investigaron el tráfico de explosivos y testimonios de confidentes y de testigos protegidos. Todo lo considera de «valor relativo», incluso el testimonio del testigo protegido S 20-04-Ñ-88, que explica que uno de los socios de Suárez Trashorras, José Ignacio Fernández Díez, Nayo, le contó que antes del 11-M intentaron vender explosivos a dos presuntos etarras y que les dispararon cuando lo trasladaban en una furgoneta, en Gijón. Ese mismo testimonio fue relatado por el también testigo protegido S 20-04-L-61, en términos parecidos, sobre las relaciones entre esta trama asturiana y la organización terrorista ETA.
48.- CAREOS. El magistrado incluye un extracto de algunos de los careos más representativos realizados con imputados, procesados y testigos. Entre otros, Toro y Suárez Trashorras. También hace referencia al careo entre Toro y el colaborador de la Guardia Civil y procesado Rafá Zouhier, que también mantuvo un careo con Suárez Trashorras. El ex minero se enfrentó a su controlador policial, el inspector Manuel García. Uno de los careos más ilustrativos es el que mantuvo Zouhier con uno de los guardias civiles de la UCO que le controlaban. El agente admitió que, en marzo de 2003, Zouhier ya le avisó de que Toro y Trashorras estaban en Madrid tratando de vender 150 kilos de explosivos.
49.- DOCUMENTOS DESCLASIFICADOS DEL CNI. El magistrado aporta en el auto de procesamiento cuatro notas del Centro Nacional de Inteligencia; dos antes de la masacre y dos posteriores. La primera, fechada el 27 de octubre de 2003, versa sobre la «evaluación de la amenaza terrorista de origen islámico».
Entre otros puntos, advertía de que se había producido un «auge de la presencia de elementos islamistas radicales en España», y que la participación en la Guerra de Irak había aumentado la «visibilidad de España en el mundo árabe». Por estos motivos, aseguraba: «Parece necesario reforzar las medidas de protección, contemplando entre ellas las de los vuelos oficiales a zonas sensibles». En la segunda nota, de noviembre de 2003, avisaba de que Allekema Lamari podía estar preparando alguna acción terrorista.
La tercera nota está fechada ya el 15 de marzo de 2004. El CNI responsabilizaba de los atentados a «un grupo local de personas, que responde a orientaciones de la yihad internacional». Consideraba a Lamari como «planificador y/o ejecutor». La última nota es del 18 de mayo de 2004. En aquella ocasión, el CNI insistía en que Lamari podía ser uno de los responsables del 11-M y el séptimo suicida de Leganés.
50.- TASACION DE DAÑOS. En el auto, el magistrado instructor incorpora un estudio económico sobre los costes materiales provocados por los atentados de Madrid y de Leganés. En cuanto al 11-M, los daños provocados por los terroristas ascienden a 17.623.612 euros. En cuanto a Leganés, a 4.387.450 euros. Así, el total supera los 22 millones de euros.
51.- TESTIGOS PROTEGIDOS. Del Olmo aporta algunas de las declaraciones prestadas por testigos protegidos en la causa. Entre otras, la del testigo protegido S 20-04-Y-26, que aportó importantes datos sobre Mouhannad Almallah Dabas, uno de los procesados por la masacre. Aportó datos sobre sus relaciones con El Tunecino, entre otros, y los lugares a los que acudía a reunirse con otros radicales.El juez detalla también el testimonio de S 20-04-W-18. «En julio de 2002, en Tánger, contrajo matrimonio con Mouhannad Almallah», comienza el relato de este testigo. Asegura que, en 2002, ya informó de las actividades del sospechoso a la Brigada Provincial de Información de Madrid. Narró que «su marido siempre le decía que hablaban de cometer un atentado y llegó a decirle que iba a cometer un atentado con su coche contra las torres de plaza de Castilla».
También detalla parte del testimonio del testigo protegido 11.304, quien no declaró sobre el 11-M en toda su extensión ante Del Olmo y se remitió a su declaración ante el magistrado Baltasar Garzón. Este testigo estuvo directamente relacionado durante años con un gran número de los implicados en los atentados de Madrid, sobre todo con El Tunecino. No obstante, Del Olmo no le citó de nuevo e incluyó en el sumario las declaraciones ante Garzón. También aporta en el auto un extracto de las 11 notas policiales realizadas por la Policía sobre sus contactos con este testigo, denominado policialmente como Cartagena. Este informador identificó a muchos de los implicados y aportó valiosísimos datos a Garzón sobre las reuniones previas a la matanza en el marco de la operación Nova.
52.- COMISIONES ROGATORIAS. El magistrado aporta las declaraciones de testigos y acusados enviadas desde diferentes países. En concreto, hay dos comisiones rogatorias desde Bélgica y otras dos desde Marruecos. Desde Francia también han sido remitidas otras dos con datos sobre sospechosos y hay una última desde Italia. Entre otros investigados están Hasan el Haski y Rabei Osman el Sayed, El Egipcio. Además, el juez aporta las grabaciones realizadas a este último en Italia: «La operación entera de Madrid fue mía.Fueron de los más queridos amigos. Cayeron como mártires. Que Alá los tenga en su gloria», indicaba el sospechoso en conversaciones telefónicas.
53.- CONTEXTO ISLAMISTA. El magistrado expone las relaciones de algunos de los procesados y de los terroristas muertos con operaciones policiales y judiciales previas al 11-M. En concreto, explica los vínculos de los sospechosos con la denominada operación Dátil. Relaciona expresamente a Said Berraj, Jamal Zougam, Khalid Zaimi Pardo, Abdenabi Chedadi y Allekema Lamari con, entre otras, la trama dirigida por Abu Dahdah. Explica que alguno de estos sospechosos han podido estar relacionados con los atentados de Casablanca. También une a sospechosos como El Egipcio o El Tunecino con la denominada operación Primavera, instruida por el Juzgado número 5 de la Audiencia Nacional desde 2002.
54.- INFORME SOBRE ORGANIZACIONES ISLAMISTAS. El magistrado realiza un informe detallado sobre las diferentes organizaciones terroristas vinculadas con el islamismo radical. Así, detalla cómo son, de dónde proceden, cómo se financian, su historia... Cita a los Hermanos Musulmanes, la Takfir Wal Hijra, la Yihad Islámica Egipcia (Al Jihad Islami), Gama'Ah Islamiya, Ansar Al Islam (los partidarios del Islam), Yeish Ansar Al Sunnah, la Red Islámica Radical Internacional (liderada por Abu Musab al Zarqawi). Posteriormente detalla otras organizaciones de Marruecos, Argelia y Libia. Este capítulo lo termina realizando una retrospectiva sobre Al Qaeda y el Frente Islámico Internacional.
55.- INFORME MEDICO SOBRE SUAREZ TRASHORRAS. El magistrado incorpora al auto un informe médico-forense sobre el ex minero elaborado el 27 de septiembre de 2005. «Presenta un trastorno de personalidad antisocial. Sí comprende su situación penitenciaria pero presenta cierto grado de desadaptación a la misma. Tiene capacidad defensiva ante los hechos imputados. No presenta patología psiquiátrica que le haga carecer de aptitudes para conocer y comprender así como de la esfera volitiva. En el momento actual no presenta alteración de la sensopercepción ni de la realidad».
56.- IDENTIFICACIONES DE TERRORISTAS. En relación a tres de los presuntos autores materiales, el juez detalla que fueron reconocidos por testigos el 11 de marzo de 2004 en el recorrido de la línea férrea Alcalá de Henares-Madrid Atocha. Explica que Allekema Lamari fue identificado por un testigo «sin ningún género de dudas» en sede judicial como una de las tres personas que vio en la estación de Alcalá de Henares, en el tren que después estalló en la parada de Santa Eugenia.
Jamal Zougam es reconocido en la estación de El Pozo por un testigo protegido que primero lo identifica en foto y después en una rueda de reconocimiento judicial, «en las dos de modo indubitado».Fue identificado de nuevo en el tren que estalló en Santa Eugenia.En esta ocasión son tres testigos protegidos (S 20-04-R10, S 20-04-C65 y S 20-04-J70). Los tres lo reconocieron primero fotográficamente y después en rueda de prensa judicializada.
El tercer identificado es Basel Ghalyoun. El testigo protegido S 20-04-B-78 lo identificó fotográficamente mientras estaba hospitalizado. Sin embargo, una vez fuera del hospital, no lo identificó en una rueda de reconocimiento.
«El 11 de marzo de 2004 fueron detectados junto a la furgoneta Renault Kangoo 0576 BRX, estacionada en la calle Infantado de Alcalá de Henares, tres varones, sobre las 7.00 horas; sobre esa misma hora, en la misma calle, otro testigo también identificó a tres varones (estas identificaciones tampoco facilitan la resolución actual)», indica el juez en el auto.
57.- IDENTIFICACIONES DE LOS PROCESADOS. En este punto, Del Olmo enumera a todos los procesados por el 11-M. Indica su nombre, lugar de nacimiento, su domicilio en España y su situación penitenciaria y judicial.
Información elaborada por Fernando Lázaro, Manuel Marraco y María Peral.
Veinticinco meses después de que España sufriera el más sangriento atentado de la Historia de Europa, el juez de la Audiencia Nacional Juan del Olmo hizo público ayer el auto de procesamiento en el que inculpa por distintos delitos a 29 de los 116 imputados.El magistrado notificará la resolución a los afectados los próximos días 16, 17 y 18 de mayo. Contra el auto cabe recurso, con lo cual los imputados que finalmente no han sido procesados no quedarán exculpados hasta que la resolución sea firme. El auto de procesamiento no implica que la investigación sobre la matanza esté finalizada.Esto ocurrirá cuando se dicte el auto de conclusión del sumario, varios de cuyos tomos permanecen bajo secreto. El propio juez señala en su resolución que «el caudal de diligencias obliga y justifica la continuidad de la investigación».(.../...)
1 Y 2.- LOS ATENTADOS DEL 11-M. El juez relata cómo el 11 de marzo de 2004, jueves, se produjo una serie encadenada de explosiones en cuatro trenes de cercanías de Madrid que discurren por el llamado Corredor del Henares.
En sólo cuatro minutos, los transcurridos entre las 7.36 y las 7.40 horas de la mañana, se desató un infierno en el que 191 personas perdieron la vida y otras 1.755 resultaron heridas.El apartado 2 del auto refleja el nombre de todas y cada una de esas personas.
En todos los trenes había cuatro bombas, excepto en el de Santa Eugenia, donde había una. En total, estallaron 10 artefactos; otros dos fallaron y fueron explosionados de forma controlada en los andenes de las estaciones de Atocha y El Pozo.
La bomba número 13, procedente también del tren de El Pozo, fue desactivada en el Parque Azorín, próximo a la comisaría de Puente de Vallecas.
3.- ACTUACIONES INICIALES. El auto detalla las primeras actuaciones de la Policía y de los Tedax en los escenarios de los atentados.
El instructor se refiere extensamente al recorrido de la bolsa-bomba que se encontraba en el tren de la estación de El Pozo, una prueba esencial del procedimiento, porque a partir de ella se empezó a descubrir la trama de los autores materiales de la masacre.
Del Olmo transcribe las declaraciones judiciales de todos los agentes que intervinieron en el transporte de esa bolsa y del resto de los objetos hallados en el citado tren. Todo ello fue introducido en grandes envoltorios de plástico que fueron llevados en furgonetas policiales a dos comisarías donde no los recepcionaron.De ahí fueron al pabellón de Ifema y, finalmente, a la comisaría del distrito de Puente de Vallecas.
En la madrugada del 12 de marzo, una policía a la que, junto a otro compañero, se había encomendado la catalogación de los objetos descubrió la bolsa-bomba, que fue desactivada en el cercano Parque Azorín.
Dos de los policías que intervinieron en el azaroso traslado de los objetos hallados en la estación de El Pozo declararon ante el juez instructor el 1 de julio de 2004. Uno de ellos relató que cuando llegaron a Ifema se entrevistó con un responsable de la Unidad de Intervención Policial (UIP), que les indicó el lugar donde debían dejar las bolsas, con una anotación sobre su procedencia.
El agente añadió que cuando volvían de camino a la comisaría recibieron la indicación de la juez de guardia de recuperar las bolsas y trasladarlas a Puente de Vallecas. Volvieron al recinto ferial y «al llegar al Pabellón 6 le dijo al responsable policial que tenía que retirar los efectos, pero éste no le dio el consentimiento, con lo que tuvo que hacer gestiones con su comisario para que les dieran permiso».
Después de que, el pasado mes de marzo, EL MUNDO difundiera el informe-instancia elaborado en octubre de 2004 por el inspector jefe Alvarez, encargado de la custodia de los objetos recogidos en el tren que estalló en El Pozo, Del Olmo decidió tomar declaración al resto de los policías que participaron en el traslado.
A excepción de los agentes que manifestaron no recordar con exactitud el recorrido de las bolsas, dado el tiempo transcurrido, la mayoría de ellos manifestó que las bolsas de plástico que albergaron los objetos «estaban cerradas» al ser introducidas en los furgones policiales sin que pudiera verse lo que había dentro.
Otro agente que participó en el transporte desde Ifema a la comisaría de Puente de Vallecas declaró que «llegan a Ifema y vio que había bolsas en el mismo pabellón de los cadáveres, pero apartadas y separadas de todo, custodiadas por gente de la UIP».
Este funcionario dijo que «está seguro de que las bolsas estaban todas cerradas, pero no recuerda si tenían precinto, nudo o de qué forma estaban cerradas». «Olían a chamuscado y sonaban móviles dentro de ellas», añadió.
Un policía más incorporó el dato de que, al llegar a Ifema con las bolsas procedentes de El Pozo, la Policía Científica les dio cinta para que acotaran la zona. Al volver al Pabellón 6 para recoger los envoltorios y trasladarlos a Puente de Vallecas, «una persona uniformada les preguntó a dónde se dirigían y, aunque íbamos en vehículos oficiales, hubo control de acceso».
«Las bolsas que recogimos estaban tal cual las dejamos», manifestó otro agente. Agregó que «no vio ninguna rota ni abierta», aunque tampoco recuerda de qué forma estaban cerradas. Sólo uno de los policías recordó que las bolsas estaban cerradas «con un nudo normal, no iban precintadas», y dijo que él no vio ninguna abierta o rota.
El juez De Olmo cree a pies juntillas a los policías que participaron en el traslado de los efectos y minusvalora el testimonio del inspector, «quien en ningún momento ha afirmado que viera todos los efectos recogidos» en El Pozo y que, «días después, tras ver los medios de comunicación, cree reconocer la bolsa que es expuesta en dichos medios como la que contenía el artefacto desactivado en el Parque Azorín, extremo que no recoge en su instancia de 25 de octubre de 2004».
«Quienes sí identifican la bolsa que contenía el artefacto explosivo, por ser ellos quienes la localizan en la comisaría de Puente de Vallecas, son los dos agentes que estaban realizando la apertura de los bolsones y el recuento de los efectos que contenían», precisa el juez. También resalta que todos los agentes afirman haber visto los envoltorios cerrados y aseguran haberlos recogido en Ifema en idénticas condiciones que tenían cuando los dejaron allí. «Cuando fueron a recogerlos, hubo de intervenir el comisario de su comisaría para que les permitieran recogerlos, lo que es expresivo de un control real de los efectos allí depositados», opina el magistrado.
«Si los efectos fueron recogidos bajo control y supervisión policial en la estación de El Pozo; se introdujeron bajo esa misma supervisión en bolsones que fueron cerrados, y dichos bolsones se trasladaron en todo momento por efectivos policiales uniformados a recintos bajo control policial, la custodia policial en todo momento garantizó con idéntica calidad de origen esos bolsones», concluye el instructor, para el que «la cadena de custodia [está] no sólo aclarada y precisada, sino preservada».
4.- INFORME POLICIA-GUARDIA CIVIL DEL 24 DE JUNIO DE 2005. El informe pericial emitido conjuntamente por la Policía y la Guardia Civil el 24 de junio de 2005 aclara, entre otros extremos, lo siguiente:
- El peso de la carga explosiva del artefacto que apareció en el primer vagón del tren de la estación de Atocha era de unos 10 kilos de dinamita. «Estos datos coinciden con los del artefacto neutralizado en la estación de El Pozo y el desactivado en la comisaría de Vallecas».
- Los efectos de la explosión controlada del artefacto encontrado en Atocha fueron «similares» a los producidos por las restantes explosiones registradas el 11 de marzo.
- El resultado de los análisis químicos indicó la presencia de dinamita en todos los focos, salvo en el vagón 4 del tren que estalló a la altura de la calle de Téllez y el vagón 5 del tren de El Pozo, «donde no se detectaron sustancias relacionadas con explosivos, si bien los efectos producidos en los dos focos fueron de las mismas características que los ocasionados por la dinamita en las demás explosiones».
- El análisis de la bolsa desactivada en el Parque Azorín determinó que se trataba de dinamita Goma 2 Eco. Esta misma sustancia es la que se encontró en el piso de Leganés donde se suicidaron siete islamistas.
- «Los artefactos que explosionaron en los trenes el 11 de marzo, en términos generales, fueron de tipo similar al desactivado en la comisaría de Vallecas (...). Se trató de artefactos de activación temporizada, con la misma hora programada para su activación, si bien sólo se llegaron a identificar dos teléfonos móviles» (el de la bolsa-bomba de Vallecas y el de la mochila explosionada de forma controlada en el andén de la estación de El Pozo).
5.- LA ROPA HALLADA CERCA DE LA ESTACION DE VICALVARO. El mismo día de los atentados, sobre el mediodía, la Guardia Civil recibió una llamada en la que un testigo comunicaba que sobre las 7.45 horas, en la Gran Vía del Este, próxima a la estación de tren de Vicálvaro (cercana a Santa Eugenia y a El Pozo), una persona se metió en una obra, se quitó el pantalón y la sudadera que llevaba y dejó estas prendas debajo de una caseta. A continuación, se marchó.
Esas prendas fueron recogidas y sometidas a un análisis de muestras biológicas, del que resultó que contenían perfiles genéticos de Asrih Rifaat Anouar, Abdennabi Kounjaa, Mohamed Oulad Akcha y Otman el Gnaoui. Los tres primeros se suicidaron el 3 de abril siguiente en el piso de Leganés en el que los presuntos autores materiales de los atentados estaban cercados por la Policía.El Gnaoui fue detenido y se encuentra en prisión.
6.- VESTIGIOS RELACIONADOS CON LOS EXPLOSIVOS. Tras el estudio de la ubicación de los artefactos en los trenes, se concluye que:
- Los terroristas colocaron el explosivo en el centro de cada uno de los vagones, salvo en el vagón 6 del tren de la calle de Téllez y el vagón 4 del tren de El Pozo.
- En los trenes de Atocha y Téllez, los artefactos estuvieron colocados en los mismos vagones (1, 4, 5 y 6).
- No es posible ubicar con exactitud en qué vagones se encontraban los dos artefactos del tren de El Pozo que no explosionaron.
Respecto a la utilización de metralla, se ha concluido que el artefacto desactivado en el Parque Azorín llevaba embutidos 640 gramos de clavos y tornillos y que, «en las distintas explosiones producidas en los cuatro trenes, se recogieron evidencias de que los artefactos también disponían de metralla», presentando «coincidencias» con los clavos y tornillos recuperados en el Parque Azorín. En cambio, no existen esas coincidencias en la metralla encontrada en el piso de Leganés.
También se afirma que «se han encontrado detonadores en todos los escenarios, que siempre han sido eléctricos» y, «en todos los casos», el explosivo recuperado ha sido dinamita Goma 2 Eco, «salvo en el registro de la finca de Chinchón [Morata], donde las analíticas realizadas sólo pudieron determinar la presencia genérica de dinamita».
En relación al uso de teléfonos móviles, el aparato que llevaba la bomba desactivada en el Parque Azorín «presentaba las modificaciones necesarias para ser utilizado como sistema de activación». No presentaban modificación alguna los teléfonos hallados en el piso de Leganés, «si bien, como quiera que las manipulaciones realizadas al teléfono del artefacto desactivado fueron bastante simples, cualquier teléfono móvil podría ser potencialmente utilizado para activar un artefacto», indica un informe policial reproducido por Del Olmo.
Otra coincidencia significativa es que en el piso de Leganés se recuperaron restos de un carrete de cable de audio de las mismas características que el cable empleado en el artefacto colocado el 2 de abril de 2004 en la vía del tren AVE, a la altura de Mocejón (Toledo).
Se resalta, igualmente, la presencia del mismo tipo de bolsas de basura -utilizadas para introducir el explosivo- en el artefacto del Parque Azorín, en la furgoneta encontrada en Alcalá de Henares y en el piso de Leganés.
7.- LA FURGONETA KANGOO. El auto de procesamiento reproduce informes policiales en los que se afirma que en la furgoneta Kangoo abandonada por los terroristas en las cercanías de la estación de tren de Alcalá de Henares aparecieron restos de un explosivo con la misma composición química (entre otros elementos, aparecía metenamina) que tenía el explosivo desactivado en el Parque Azorín. Dio el mismo resultado el análisis de una muestra-patrón de dinamita Goma 2 Eco, «todo lo cual viene a determinar que se utilizó el mismo explosivo».
En la furgoneta aparecieron detonadores de características similares a las de las bombas desactivadas y que coinciden con los suministrados a la empresa Caolines de Merillés, propietaria de Mina Conchita.
8.- EL ARTEFACTO DEL AVE. El 2 de abril de 2004 se encontró un artilugio explosivo adherido a la vía del tren AVE Madrid-Sevilla, en la zona de Mocejón (Toledo). Estaba compuesto por Goma 2 Eco, sustancia que también apareció en el piso de Leganés.
9 Y 10.- EL DESESCOMBRO DE LA VIVIENDA DE LEGANES. Siete presuntos terroristas (Tachid Oulad Akcha, Asrih Rifaat Anouar, Sarhane ben Abdelmajid Fakhet, Jamal Ahmidan, Mohamed Oulad Akcha, Allekema Lamari, Abdennabi Kounjaa) se suicidaron en el número 40 de la calle de Carmen Martín Gaite el 3 de abril de 2004, cuando estaban cercados por fuerzas policiales. Sus identidades han podido ser establecidas por el análisis de ADN de las muestras orgánicas halladas tras la explosión, en la que murió el policía Francisco Javier Torronteras.
La Policía estima que los terroristas utilizaron unos 30 kilos de Goma 2 Eco para suicidarse. Además, se recuperó un total de 17,431 kilos de esa dinamita, que es «de las mismas características» a la utilizada para confeccionar el artefacto desactivado en el Parque Azorín.
11.- LA PARCELA DE MORATA. Las investigaciones para localizar el lugar donde pudieron activarse las tarjetas telefónicas utilizadas en los artefactos explosivos condujeron a una finca alquilada por Jamal Ahmidan en el polígono 44 de Chinchón, cerca de la población de Morata de Tajuña.
En este lugar fueron halladas 97 huellas lofoscópicas, entre ellas las de los hermanos Ahmidan; la de Abdelmajid Bouchar (que escapó del piso de Leganés, siendo luego detenido), y la de tres de los suicidas de Leganés (Kounjaa, Sarhane Ben Abdelmajid Fakhet y el propio Jamal Ahmidan).
12.- EL SKODA. El coche Skoda Fabia 3093 CKF fue localizado el 13 de junio de 2004 en la calle Infantado de la localidad de Alcalá de Henares, a escasos metros del lugar donde fue encontrada el 11-M la furgoneta Kangoo.
El auto recoge la declaración de la persona que robó el vehículo en Benidorm y lo vendió a Sarhane, El Tunecino. También refleja las multas que el coche recibió antes de las Navidades de 2003 por estar mal aparcado en la Avenida de Bruselas, próxima a la casa de El Tunecino.
No obstante, el juez no aclara por qué la presencia de este coche en Alcalá de Henares, cerca de la Kangoo, no fue detectada por la Policía.
13.- ANALISIS DE MUESTRAS TOMADAS EN ASTURIAS. La Guardia Civil ha comparado la tierra de la Mina Conchita con muestras de tierra de zapatos utilizados por José Emilio Suárez Trashorras. Los resultados no son concluyentes.
14.- LA VIVIENDA DE ALBOLOTE. También ha sido investigada una casa alquilada por Asrih Rifaat Anouar en Albolote (Granada) el 6 de marzo de 2004.
15.- LOS EFECTOS HALLADOS EN UNA BOLSA DE SAED EL HARRAK. El Harrak, detenido el 10 de mayo de 2004, trabajaba en una empresa de construcción cuyo propietario entregó a la Policía una bolsa con efectos de su empleado. Entre ellos figuraban tres cuartillas manuscritas en árabe. Su análisis ha permitido comprobar que el escrito pertenece al suicida Kounjaa y que se trata de una especie de testamento.
16 Y 17.- HUELLAS EN LIBROS APARECIDOS EN LEGANES. El juez ha ordenado analizar las huellas aparecidas en libros religiosos encontrados en el piso en el que los siete terroristas se suicidaron y las huellas encontradas en otros objetos, como bolsas de plástico o vehículos. Ello ha permitido situar a las mismas personas en diversos escenarios relacionados con la trama terrorista. Así, huellas de Bouchar han aparecido en el piso de Leganés y también en la casa de Morata.
18.- LOS VEHICULOS. El auto hace referencia a los vehículos utilizados por los terroristas y por otros implicados, como Suárez Trashorras.
El juez parece sostener que el explosivo de Asturias fue trasladado a Madrid en el Volkswagen Golf de Ahmidan, El Chino, cuyo maletero tenía capacidad para transportar 210 kilos de dinamita.
En el maletero de ese coche fue encontrado nitroglicol, sustancia que se ha hallado en la dinamita de los trenes.
19 y 20.- TEXTOS MANUSCRITOS Y DOCUMENTOS OFICIALES. El auto indica que se han analizado los documentos manuscritos hallados en los domicilios de los implicados, cuya autoría, en algunos casos, no ha podido determinarse.
También se ha analizado la autenticidad de numerosos documentos oficiales, como carnés de conducir y pasaportes.
21 Y 22.- REGISTROS EN EL CERRO DE LOS ANGELES Y VILLALOBOS.El primer piso era la vivienda de los hermanos de El Chino y el segundo era la casa del propio Jamal Ahmidan.
23 Y 24.- LAS CINTAS. La Policía ha analizado la cinta de vídeo en la que se reivindicó el atentado, encontrada en una papelera cerca de la M-30, y otra cinta videográfica hallada en el piso de Leganés. Ha concluido que «no existen diferencias sustanciales» ni respecto a las personas que aparecen ni respecto al armamento que exhiben.
25.- ANALISIS DE LA TELA VERDE. Una tela rectangular de color verde y con inscripciones en árabe fue recuperada en la vivienda de Leganés. La Policía ha concluido que es la misma que aparece en el vídeo de reivindicación del atentado.
26.- QUIEN LEYO EL COMUNICADO. El juez asume la tesis policial de que el terrorista que leyó el comunicado de reivindicación del atentado fue El Chino, para lo que se basa en reconocimientos de voz realizados por cuatro testigos.
27.- LA REIVINDICACION. El auto reproduce el comunicado leído en la cinta que apareció en las proximidades de la mezquita de la M-30.
Esa cinta «era de las mismas características que la comprada el 8 de marzo de 2004 por dos varones en el Bazar Top». El juez no identifica a estos individuos.
28 Y 29.- ADN. Una parte sustancial de la investigación se basa en los perfiles genéticos determinados gracias a las muestras orgánicas recogidas en los diferentes escenarios. Del Olmo admite que varias de ellas no han podido identificarse.
30.- ORIGEN DE DETONADORES Y EXPLOSIVOS. Los informes aportados por los Cuerpos policiales determinan que el tipo de detonadores de aluminio localizados «se sirve exclusivamente a la empresa Caolines del Merillés en la Península y se utiliza únicamente en las dos explotaciones de esta empresa: Mina Conchita y Mina Collada».
Para determinar la procedencia fue clave la intervención directa del comisario jefe de la Unidad Central de Desactivación de Explosivos: «Por gestiones realizadas personalmente por el comisario jefe de esta unidad, se ha podido determinar en un alto porcentaje de acierto que los detonadores utilizados el 11-M proceden de las canteras Caolines de Merillés. Los mismos pertenecen a la última remesa de febrero del presente año».
31.- SOPORTES INFORMATICOS RECUPERADOS. El magistrado describe el contenido de los discos duros y del resto del material informático intervenido durante las diferentes operaciones policiales. Así, detalla el contenido del ordenador interceptado en la vivienda habitual de El Chino. Además, se recompone el historial de las páginas de Internet visitadas desde ese ordenador. Entre otras, «enlaces sobre victimario musulmán en Palestina, Irak, Chechenia y Afganistán». Y recoge un documento en el que se explica la manera de actuar de las guerrillas, se aportan datos operativos de las armas ligeras y se dicta una serie de recomendaciones para trabajar en grupo: «Grupo del trabajo clandestino». Y divide: «Grupos de liderazgo, grupo de reunir las informaciones, grupo de proveer y grupo de ejecución». Entre el material había fotografías de los atentados de Madrid. También figura un mensaje de las Brigadas de Abu Hafs al Masri, de 15 de marzo de 2004.
El juez también incluye el análisis del disco duro del ordenador de Leganés. Hay abundantes ficheros de contenido doctrinal. También hay documentos de carácter proselitista yihadista. Hay una parte en el disco duro de carácter operativo-militar en la que aparecen, entre otros ficheros, grabaciones de atentados con bomba de la insurgencia iraquí contra EEUU.
En esta terminal también se han encontrado manuales sobre la «guerra de guerrillas», otro manual sobre el uso de pistola con silenciador y una enciclopedia de armas de guerra y dibujos con la composición de artefactos explosivos. En el auto se incluye el análisis realizado a los puertos USB intervenidos en Leganés.Uno de los documentos se titula La preparación para la Yihad y se destaca «la importancia del entrenamiento militar para los musulmanes». Se indica también que se accedió a páginas de Internet para buscar información precisa de varias sinagogas repartidas por España.
32.- ANALISIS DE DOCUMENTACION INFORMATICA. El juez detalla los informes periciales de la Unidad Central de Información sobre la reconstrucción del material informático recuperado tras la explosión del piso de Leganés. De nuevo localizan croquis sobre cómo fabricar artefactos explosivos. También figuran numerosas direcciones de Internet donde se analiza el terrorismo internacional y la yihad. Uno de los documentos recuperados se refiere a los teléfonos móviles. «Se hace un profundo y preciso análisis de las características del sistema de telefonía, de las posibilidades que brinda a la investigación policial, de los riesgos del uso de la telefonía móvil y de las terminales telefónicas, las tarjetas, así como de las cautelas que deben adoptarse», indica el informe policial del contenido del material informático de los terroristas.En otro archivo se detallan los métodos para ocultar y camuflar explosivos. Se explica también cómo fabricar dinamita, entre otros componentes explosivos.
33.- OTROS SOPORTES. El juez incluye otros documentos intervenidos por la Policía, además de en el piso de Leganés, en otros domicilios de Madrid utilizados por los terroristas. En la vivienda de Carmen Martín Gaite se localizó información sobre fincas judías (fundamentalmente en Madrid y Avila) susceptibles de convertirse en objetivo de los islamistas.
34.- LOS DOCUMENTOS DE GLOBAL ISLAMIC MEDIA. Tras los atentados, la Policía también navegó por Internet. En la web de un instituto noruego que investiga el islamismo halló un escrito extraído de la web Global Islamic Media. «Mensaje al pueblo español», comenzaba el escrito, que añadía: «Decimos que para forzar al Gobierno español a la retirada de Irak, la resistencia debe propinar golpes dolorosos a sus tropas, y que eso se vea acompañado de un seguimiento informativo que aclare la verdad de la situación dentro de Irak. Debe aprovecharse al máximo la proximidad de la fecha de las elecciones generales en España en el tercer mes del año próximo (marzo 2004)».
«Creemos que el Gobierno español no soportará más de dos o tres golpes, como máximo, antes de verse obligado a retirarse por la presión popular. Si sus tropas permanecen tras estos golpes, la victoria del Partido Socialista estará probablemente garantizada (ver porcentajes), y la retirada de las tropas españolas estará en la lista de su proyecto electoral».
«Por último, insistimos en que la retirada de las fuerzas españolas o italianas de Irak supondrá una presión enorme para la presencia británica, que tal vez Tony Blair no podría soportar».
«De este modo caerán las piezas de dominó rápidamente, pero permanecerá el problema principal de la caída de la primera ficha».
35.- MENSAJE DE BIN LADEN DE ABRIL DE 2004. El líder de Al Qaeda afirma: «Os quiero comunicar que 'vuestra mercancía os ha sido devuelta' a través de lo que ocurrió el 11 de Septiembre y el 11 de Marzo». «La verdadera justicia es la reciprocidad», añade, para, a continuación, hacer una oferta: «Les planteo una iniciativa de paz que consiste en que nos comprometemos a cesar las operaciones contra todos los países que prometan no agredir a los musulmanes o interferir en sus asuntos, incluyendo el que no forme parte del complot estadounidense contra el mundo islámico (...). Cesad de derramar nuestra sangre y de esa forma vosotros os ahorraréis la vuestra (...). Matar a los rusos fue consecuencia de su invasión de Afganistán y Chechenia y matar a los europeos fue consecuencia de la invasión de Irak y Afganistán, y lo mismo contra los americanos en Nueva York».
36.- INFORMACIONES PREVIAS AL 11-M SOBRE CASABLANCA. Fueron remitidas a Del Olmo por el Juzgado número 5 de la Audiencia Nacional, en el que Baltasar Garzón ya investigaba la trama de ese atentado, que tuvo lugar en mayo de 2003. El informe, elaborado tres meses antes del 11-M, ya incluía los nombres de dos figuras centrales de los atentados de Madrid: Jamal Zougam y El Tunecino.
37.- TELEFONO Y TARJETA DE LA MOCHILA BOMBA DE VALLECAS. Este apartado incluye uno de los aspectos que aún no ha sido aclarado en la trama terrorista: la identidad de quienes compraron días antes de los atentados varios teléfonos móviles que fueron empleados por la célula de El Chino y El Tunecino. El juez recoge el relato de quien vendió los terminales, que no ha sido procesado: «Que el día 3 de marzo he vendido tres teléfonos sin liberar marca Mitsubishi Trium T110. (...) El comprador era un hombre normal, pelo liso, bien peinado, que medía aproximadamente 1,75 o algo más. De unos 25 o 30 años, más de 30, no. Era joven, era delgado, sin barba ni bigote, su tez era ni blanco ni demasiado moreno [sic], era moreno pero más blanco que los de raza hindú. No llevaba gafas, no tenía nada en la cara que le llamara la atención, era una cara normal, las cejas no eran demasiado pobladas, eran normales, la frente también era normal, su cara era normal. Entre el declarante y el cliente hablaron en español, el cliente era extranjero y me dijo que era de Bulgaria (...). El día 3 por la tarde el cliente manifestó que quería seis terminales más iguales (...). Fue acompañado de otra persona, que era de características normales. La altura entre ellos era casi la misma, las paletas las tiene un poquito separadas, poco pelo delante y el restante cortado normal, y más o menos de la misma edad que el otro. Y se dirige al declarante en español, pero considero que era extranjero, no español. Mientras yo apuntaba el IMEI en mi libro entre ellos hablaban en extranjero y les pregunté de dónde eran y me dijo uno de ellos que eran búlgaros (...). El día 8 de marzo vino el chico que había venido por primera vez el día 4, y compró otro teléfono Trium T110 (...).Compró también un reloj Casio de muñeca con cadena metálica, digital. Una cinta de cámara de vídeo digital DVM».
38.- LAS BOMBAS, EN MORATA. «Los datos de activación de la tarjeta, en combinación con el viaje que se estaba realizando la noche del 9 de marzo de 2004 hacia Madrid de parte de los miembros de la presunta célula terrorista, permite considerar que las operaciones dirigidas a la preparación de los terminales telefónicos se efectuaron el día 10 de marzo de 2004 (y, presumiblemente, con luz suficiente -natural-, a fin de facilitar la labor y asegurar el objetivo)». Siete tarjetas telefónicas «fueron usadas para activar teléfonos móviles bajo el área de influencia de Morata de Tajuña, sin realizarse ninguna llamada; tal circunstancia, junto al hecho de que los siete IMEIS no se volvieron a registrar en el área de Amena, lleva a considerar que esas siete tarjetas podrían haber sido utilizadas para la confección y activación de los artefactos explosivos».
39.- LAS LLAMADAS. Analiza una gran cantidad de llamadas, incluidas las realizadas en los dos días previos al 11-M. Tanto al inicio como al final del informe, insiste en la importancia y fiabilidad de estos datos para la investigación: «De todo lo cual cabe inferir: vinculaciones entre los usuarios de tarjetas SIM y terminales telefónicos (identificados por su IMEI), traslados de personas de un lugar a otro (itinerarios, preguntas, lugares de contacto, reiteraciones de contacto -tanto físicos como por llamadas telefónicas-), precisiones que pueden fijarse a otros datos de la investigación (vestigios lofoscópicos y de ADN dejados en la finca de Albolote por personas distintas a quienes intervinieron en el alquiler, momento a partir del cual podrían haberse preparado los sistemas de activación de los artefactos explosivos, etcétera), confirmación de otros extremos obtenidos en el curso de la instrucción judicial (la información telefónica permite verificar declaraciones testificales, desvirtuar tesis exculpatorias, corroborar usos exclusivos del material telefónico identificado por parte de los presuntos miembros de la célula terrorista, etcétera)». «Es por ello que resulta necesario justificar la calidad de dicha información telefónica, y, en tal sentido, el informe emitido por dos peritos especialistas en telefonía móvil que a continuación se recoge».
40.- HABLAN LOS TECNICOS. Se trata de un informe pericial emitido por dos expertos en telecomunicaciones (telefonía móvil) que llegó a Del Olmo la semana pasada. En él responden a varias dudas técnicas que les había planteado la Policía.
41.- TODAS LAS LLAMADAS. Se trata de un extracto casi íntegro del informe llegado el 20 de febrero a la Audiencia Nacional con todas las llamadas del 11-M. Entre la ingente cantidad de información que ofrece aparece una llamada de atención por los contactos, aún no aclarados, entre Jamal Ahmidan, El Chino, y alguien «no identificado» de la prisión de A Lama (Pontevedra).La Policía explica al juez que considera estas llamadas «del máximo interés».
No son los únicos datos que faltan por completar. El informe también tiene pasajes como el que afirma: «Con respecto a esta última tarjeta no se ha podido determinar quién es el usuario».
42.- EL EXPLOSIVO, DIA A DIA. La Guardia Civil ofrece un relato casi diario de las relaciones que mantuvieron los miembros de la trama asturiana con el grupo de Jamal. Comienza con un viaje a Madrid de Trashorras y Carmen Toro, donde se encuentran con El Chino. Concluye 155 folios después con una llamada de Antonio Toro el 19 de marzo a un comunicante «anónimo».
43.- HABLA EL CONFIDENTE. Este apartado recoge las conversaciones del confidente de la Guardia Civil Rafá Zouhier con Víctor -su controlador en la Guardia Civil- tras los atentados. El marroquí le ofrece datos de los implicados en la masacre. «¿Pero tú estás seguro de que ese tío [El Chino] tiene algo que ver?», le pregunta el agente. Rafá responde: «Eh, tronco, escúchame, tiene detonadores, tiene mandos a distancia, 300 metros, tiene Goma 2 (...). Teléfonos no he podido conseguir (...). Es bajito, metro setenta y pico, con los ojos así como... es moreno, así muy pequeño y muy delgado...Es un tío religiosísimo, un tío que reza mucho, está en la mezquita también los viernes, a lo mejor no va más...».
44.- OTROS TELEFONOS. Incluye cuatro informes relacionados con los teléfonos y tarjetas de crédito. Uno de ellos intenta reconstruir los desplazamientos de Trashorras. En el referido al viaje a Asturias para hacerse con la dinamita, por ejemplo, explica que hay datos de sobra para acreditar el viaje de El Chino, pero no así para asegurar, en base a las llamadas, que el suicida Kounjaa fuera uno de los que recogieran los explosivos de la mina.
45.- FINANCIACION Y OTRAS CUESTIONES RELACIONADAS. El magistrado calcula los costes económicos de la masacre y las vías de financiación de los terroristas. Salvo las armas y la documentación falsa, estima que los gastos generados por la adquisición de los explosivos (entre 31.875 y 45.000 euros), el alquiler de inmuebles, teléfonos y tarjetas SIM «suponen un coste total no inferior a 54.271, lo que, sumado a los 51.795 euros en metálico acumulados por los miembros de la célula para hacer frente a éstos y subsiguientes gastos, supondría una disponibilidad económica inmediata de no menos de 105.000 euros para financiar el conjunto de la operación».Los terroristas contaban, además, con reservas económicas, «en forma de hachís y MDMA», por valor de «entre 1.353.677 y 1.537.663 euros».
Aclara que se utilizó la «microfinanciación» para costear los atentados. Contaron con el tráfico de drogas para afrontar la mayor parte de los gastos, y con la comisión de otros delitos para proveerse directamente de utensilios necesarios para los atentados, como el robo de coches.
46.- CONSECUENCIA DE LOS CONTACTOS TELEFONICOS. Del Olmo detalla informes sobre seguimientos telefónicos a algunos de los más destacados implicados. Y cruza los datos de los números utilizados con los facilitados por testigos protegidos en la causa y que demuestran las relaciones que mantenían entre sí los ahora procesados.Fundamentalmente se sigue a El Chino y a El Tunecino, los más representativos de la célula autora de la masacre de Madrid.Se detallan estos seguimientos desde agosto de 2003 hasta noviembre de ese mismo año.
47.- ROBOS DE EXPLOSIVOS EN ASTURIAS Y TRASLADO A MADRID. El juez considera de «valor relativo» todos los informes policiales y testimonios de testigos sobre el tráfico de explosivos en Asturias denunciado en reiteradas ocasiones entre 2001 y 2003. Detalla «una serie de diligencias de valor relativo básicamente relacionada con un tiempo anterior a 2004, vinculadas a actividades de confidentes policiales y ámbito delincuencial». «El valor es relativo por cuanto se están refiriendo a presuntas actividades delictivas que no son objeto de esta instrucción judicial pero muestran una previa actividad delictiva presuntamente coincidente en lugar, personas y materia; lo que es de por sí expresivo de una preexistente capacidad de comisión delictiva a considerar». Así, explica la denominada operación Pipol, en la que se desmanteló la trama delictiva dirigida por José Emilio Suárez Trashorras y Antonio Toro Castro, a los que se les intervinieron explosivos. Añade numerosos informes de las unidades de la Guardia Civil y de la Policía Nacional que investigaron el tráfico de explosivos y testimonios de confidentes y de testigos protegidos. Todo lo considera de «valor relativo», incluso el testimonio del testigo protegido S 20-04-Ñ-88, que explica que uno de los socios de Suárez Trashorras, José Ignacio Fernández Díez, Nayo, le contó que antes del 11-M intentaron vender explosivos a dos presuntos etarras y que les dispararon cuando lo trasladaban en una furgoneta, en Gijón. Ese mismo testimonio fue relatado por el también testigo protegido S 20-04-L-61, en términos parecidos, sobre las relaciones entre esta trama asturiana y la organización terrorista ETA.
48.- CAREOS. El magistrado incluye un extracto de algunos de los careos más representativos realizados con imputados, procesados y testigos. Entre otros, Toro y Suárez Trashorras. También hace referencia al careo entre Toro y el colaborador de la Guardia Civil y procesado Rafá Zouhier, que también mantuvo un careo con Suárez Trashorras. El ex minero se enfrentó a su controlador policial, el inspector Manuel García. Uno de los careos más ilustrativos es el que mantuvo Zouhier con uno de los guardias civiles de la UCO que le controlaban. El agente admitió que, en marzo de 2003, Zouhier ya le avisó de que Toro y Trashorras estaban en Madrid tratando de vender 150 kilos de explosivos.
49.- DOCUMENTOS DESCLASIFICADOS DEL CNI. El magistrado aporta en el auto de procesamiento cuatro notas del Centro Nacional de Inteligencia; dos antes de la masacre y dos posteriores. La primera, fechada el 27 de octubre de 2003, versa sobre la «evaluación de la amenaza terrorista de origen islámico».
Entre otros puntos, advertía de que se había producido un «auge de la presencia de elementos islamistas radicales en España», y que la participación en la Guerra de Irak había aumentado la «visibilidad de España en el mundo árabe». Por estos motivos, aseguraba: «Parece necesario reforzar las medidas de protección, contemplando entre ellas las de los vuelos oficiales a zonas sensibles». En la segunda nota, de noviembre de 2003, avisaba de que Allekema Lamari podía estar preparando alguna acción terrorista.
La tercera nota está fechada ya el 15 de marzo de 2004. El CNI responsabilizaba de los atentados a «un grupo local de personas, que responde a orientaciones de la yihad internacional». Consideraba a Lamari como «planificador y/o ejecutor». La última nota es del 18 de mayo de 2004. En aquella ocasión, el CNI insistía en que Lamari podía ser uno de los responsables del 11-M y el séptimo suicida de Leganés.
50.- TASACION DE DAÑOS. En el auto, el magistrado instructor incorpora un estudio económico sobre los costes materiales provocados por los atentados de Madrid y de Leganés. En cuanto al 11-M, los daños provocados por los terroristas ascienden a 17.623.612 euros. En cuanto a Leganés, a 4.387.450 euros. Así, el total supera los 22 millones de euros.
51.- TESTIGOS PROTEGIDOS. Del Olmo aporta algunas de las declaraciones prestadas por testigos protegidos en la causa. Entre otras, la del testigo protegido S 20-04-Y-26, que aportó importantes datos sobre Mouhannad Almallah Dabas, uno de los procesados por la masacre. Aportó datos sobre sus relaciones con El Tunecino, entre otros, y los lugares a los que acudía a reunirse con otros radicales.El juez detalla también el testimonio de S 20-04-W-18. «En julio de 2002, en Tánger, contrajo matrimonio con Mouhannad Almallah», comienza el relato de este testigo. Asegura que, en 2002, ya informó de las actividades del sospechoso a la Brigada Provincial de Información de Madrid. Narró que «su marido siempre le decía que hablaban de cometer un atentado y llegó a decirle que iba a cometer un atentado con su coche contra las torres de plaza de Castilla».
También detalla parte del testimonio del testigo protegido 11.304, quien no declaró sobre el 11-M en toda su extensión ante Del Olmo y se remitió a su declaración ante el magistrado Baltasar Garzón. Este testigo estuvo directamente relacionado durante años con un gran número de los implicados en los atentados de Madrid, sobre todo con El Tunecino. No obstante, Del Olmo no le citó de nuevo e incluyó en el sumario las declaraciones ante Garzón. También aporta en el auto un extracto de las 11 notas policiales realizadas por la Policía sobre sus contactos con este testigo, denominado policialmente como Cartagena. Este informador identificó a muchos de los implicados y aportó valiosísimos datos a Garzón sobre las reuniones previas a la matanza en el marco de la operación Nova.
52.- COMISIONES ROGATORIAS. El magistrado aporta las declaraciones de testigos y acusados enviadas desde diferentes países. En concreto, hay dos comisiones rogatorias desde Bélgica y otras dos desde Marruecos. Desde Francia también han sido remitidas otras dos con datos sobre sospechosos y hay una última desde Italia. Entre otros investigados están Hasan el Haski y Rabei Osman el Sayed, El Egipcio. Además, el juez aporta las grabaciones realizadas a este último en Italia: «La operación entera de Madrid fue mía.Fueron de los más queridos amigos. Cayeron como mártires. Que Alá los tenga en su gloria», indicaba el sospechoso en conversaciones telefónicas.
53.- CONTEXTO ISLAMISTA. El magistrado expone las relaciones de algunos de los procesados y de los terroristas muertos con operaciones policiales y judiciales previas al 11-M. En concreto, explica los vínculos de los sospechosos con la denominada operación Dátil. Relaciona expresamente a Said Berraj, Jamal Zougam, Khalid Zaimi Pardo, Abdenabi Chedadi y Allekema Lamari con, entre otras, la trama dirigida por Abu Dahdah. Explica que alguno de estos sospechosos han podido estar relacionados con los atentados de Casablanca. También une a sospechosos como El Egipcio o El Tunecino con la denominada operación Primavera, instruida por el Juzgado número 5 de la Audiencia Nacional desde 2002.
54.- INFORME SOBRE ORGANIZACIONES ISLAMISTAS. El magistrado realiza un informe detallado sobre las diferentes organizaciones terroristas vinculadas con el islamismo radical. Así, detalla cómo son, de dónde proceden, cómo se financian, su historia... Cita a los Hermanos Musulmanes, la Takfir Wal Hijra, la Yihad Islámica Egipcia (Al Jihad Islami), Gama'Ah Islamiya, Ansar Al Islam (los partidarios del Islam), Yeish Ansar Al Sunnah, la Red Islámica Radical Internacional (liderada por Abu Musab al Zarqawi). Posteriormente detalla otras organizaciones de Marruecos, Argelia y Libia. Este capítulo lo termina realizando una retrospectiva sobre Al Qaeda y el Frente Islámico Internacional.
55.- INFORME MEDICO SOBRE SUAREZ TRASHORRAS. El magistrado incorpora al auto un informe médico-forense sobre el ex minero elaborado el 27 de septiembre de 2005. «Presenta un trastorno de personalidad antisocial. Sí comprende su situación penitenciaria pero presenta cierto grado de desadaptación a la misma. Tiene capacidad defensiva ante los hechos imputados. No presenta patología psiquiátrica que le haga carecer de aptitudes para conocer y comprender así como de la esfera volitiva. En el momento actual no presenta alteración de la sensopercepción ni de la realidad».
56.- IDENTIFICACIONES DE TERRORISTAS. En relación a tres de los presuntos autores materiales, el juez detalla que fueron reconocidos por testigos el 11 de marzo de 2004 en el recorrido de la línea férrea Alcalá de Henares-Madrid Atocha. Explica que Allekema Lamari fue identificado por un testigo «sin ningún género de dudas» en sede judicial como una de las tres personas que vio en la estación de Alcalá de Henares, en el tren que después estalló en la parada de Santa Eugenia.
Jamal Zougam es reconocido en la estación de El Pozo por un testigo protegido que primero lo identifica en foto y después en una rueda de reconocimiento judicial, «en las dos de modo indubitado».Fue identificado de nuevo en el tren que estalló en Santa Eugenia.En esta ocasión son tres testigos protegidos (S 20-04-R10, S 20-04-C65 y S 20-04-J70). Los tres lo reconocieron primero fotográficamente y después en rueda de prensa judicializada.
El tercer identificado es Basel Ghalyoun. El testigo protegido S 20-04-B-78 lo identificó fotográficamente mientras estaba hospitalizado. Sin embargo, una vez fuera del hospital, no lo identificó en una rueda de reconocimiento.
«El 11 de marzo de 2004 fueron detectados junto a la furgoneta Renault Kangoo 0576 BRX, estacionada en la calle Infantado de Alcalá de Henares, tres varones, sobre las 7.00 horas; sobre esa misma hora, en la misma calle, otro testigo también identificó a tres varones (estas identificaciones tampoco facilitan la resolución actual)», indica el juez en el auto.
57.- IDENTIFICACIONES DE LOS PROCESADOS. En este punto, Del Olmo enumera a todos los procesados por el 11-M. Indica su nombre, lugar de nacimiento, su domicilio en España y su situación penitenciaria y judicial.
Información elaborada por Fernando Lázaro, Manuel Marraco y María Peral.
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