Siete expertos para una misma tesis
09-08-06
Siete expertos para una misma tesis
Siete expertos para una misma tesis
MADRID.- Este diario publicó el 24 de julio una entrevista con el tedax de la Guardia Civil retirado Luis Angel Marugán Casado. Según este especialista, lo declarado ante el juez Del Olmo por la responsable del laboratorio de los Tedax que examinó los focos de las explosiones «no tiene lógica». La química afirmó que «sólo se pudo fijar el tipo de explosivo, dinamita, pero no sus componentes».
Para Marugán, «la dinamita se determina en base a unos componentes», por lo que no se puede nombrar el todo sin encontrar sus partes. Aseguró que «el laboratorio tiene que especificar» lo que ha encontrado, y así determinar qué tipo de dinamita estalló. Antes de que una bomba trampa de ETA le apartase del servicio activo, Marugán había trabajado 14 años en el cuerpo de desactivación de explosivos.
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El 30 de julio, el doctor Enrique de la Morena, ex jefe del Departamento de Bioquímica Experimental de la Fundación Jiménez Díaz, consideró en estas páginas que «los que trabajamos en esto sabemos que no es complicado descomponer una muestra, por ínfimo que sea su tamaño. Es muy sencillo diferenciar la nitroglicerina del nitroglicol».
En ese mismo artículo, Teresa de Lara, experta en el campo de la cromatografía, señaló que, a su juicio, «no es creíble afirmar tajantemente la imposibilidad técnica de identificar los componentes de una muestra, porque los que trabajamos con cromatografía hacemos eso de forma rutinaria con gran precisión». Así, en su opinión, «parece como si hubieran obtenido resultados en una analítica que no quisieron hacer públicos por el motivo que sea, y ahora buscan excusas para ocultar lo que encontraron porque no les interesa que se sepa».
Otros cuatro
Además de estos tres especialistas, EL MUNDO recogió el punto de vista de otros cuatro expertos que corroboraron las mismas tesis: el farmacéutico Francisco Javier Bermejo, que trabaja con técnicas de cromatografía en una empresa farmacéutica; el oficial del Ejército Miguel Torres; el profesor de la Escuela de Minas Fernando María García Bastante; y el catedrático de Física Aplicada de la Universidad de Alcalá de Henares Antonio Ruiz de Elvira.
Especialmente riguroso fue el análisis que hizo este último sobre la técnica de la cromatografía de capa fina -la que emplean los Tedax-, «capaz de analizar muestras de 0,000000001 gramos». Sobre la contaminación con metenamina que se detectó tanto en la muestra de Goma 2 ECO hallada en la Renault Kangoo como en la muestra patrón de ese tipo que se utilizó en el laboratorio de los Tedax, Ruiz de Elvira apuntó que «la probabilidad de que se produzca es despreciable».
Para Marugán, «la dinamita se determina en base a unos componentes», por lo que no se puede nombrar el todo sin encontrar sus partes. Aseguró que «el laboratorio tiene que especificar» lo que ha encontrado, y así determinar qué tipo de dinamita estalló. Antes de que una bomba trampa de ETA le apartase del servicio activo, Marugán había trabajado 14 años en el cuerpo de desactivación de explosivos.
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El 30 de julio, el doctor Enrique de la Morena, ex jefe del Departamento de Bioquímica Experimental de la Fundación Jiménez Díaz, consideró en estas páginas que «los que trabajamos en esto sabemos que no es complicado descomponer una muestra, por ínfimo que sea su tamaño. Es muy sencillo diferenciar la nitroglicerina del nitroglicol».
En ese mismo artículo, Teresa de Lara, experta en el campo de la cromatografía, señaló que, a su juicio, «no es creíble afirmar tajantemente la imposibilidad técnica de identificar los componentes de una muestra, porque los que trabajamos con cromatografía hacemos eso de forma rutinaria con gran precisión». Así, en su opinión, «parece como si hubieran obtenido resultados en una analítica que no quisieron hacer públicos por el motivo que sea, y ahora buscan excusas para ocultar lo que encontraron porque no les interesa que se sepa».
Otros cuatro
Además de estos tres especialistas, EL MUNDO recogió el punto de vista de otros cuatro expertos que corroboraron las mismas tesis: el farmacéutico Francisco Javier Bermejo, que trabaja con técnicas de cromatografía en una empresa farmacéutica; el oficial del Ejército Miguel Torres; el profesor de la Escuela de Minas Fernando María García Bastante; y el catedrático de Física Aplicada de la Universidad de Alcalá de Henares Antonio Ruiz de Elvira.
Especialmente riguroso fue el análisis que hizo este último sobre la técnica de la cromatografía de capa fina -la que emplean los Tedax-, «capaz de analizar muestras de 0,000000001 gramos». Sobre la contaminación con metenamina que se detectó tanto en la muestra de Goma 2 ECO hallada en la Renault Kangoo como en la muestra patrón de ese tipo que se utilizó en el laboratorio de los Tedax, Ruiz de Elvira apuntó que «la probabilidad de que se produzca es despreciable».
Comentarios
Estamos hablando de cantidades limitadas micromillonésimas de gramo.
Que en 10 focos de explosiones (12 contando las detonadas por los TEDAX) el cromatógrafo de espectro no halla podido encontrar restos de los componentes del explosivo utilizado ES TOTALMENTE IMPOSIBLE.
Pueden decirnos lo que quieran, pero la verdad es sólo esa.