¿Sin EL MUNDO y el PP a qué hubiera dedicado el PSOE su Conferencia?

18-09-06



Impresiones

¿Sin EL MUNDO y el PP a qué hubiera dedicado el PSOE su Conferencia?

Zapatero concluyó ayer la Conferencia Política del PSOE con un discurso triunfalista y lleno de tópicos, en el que contrapuso una gestión idílica de su Gobierno con «la crispación» que intenta sembrar el PP. Ni una sola referencia autocrítica. Zapatero aludió a los dirigentes del PP como «una nueva extrema derecha que pretende revisar la historia», que «deslegitima las institituciones» y que «pone en cuestión el resultado electoral». Frente a esta derecha que encarna hoy el PP, Zapatero elogió a «la derecha democrática» de la Transición, que apostó por las libertades y la Constitucion frente al «golpismo» y mencionó a Manuel Fraga como ejemplo de aquel talante. Su descalificación del PP y su pretensión de contraponer a Fraga como modelo sólo demuestran el poco respeto del presidente a la oposición, a la que intenta deslegitimar de forma obsesiva. Pocas cosas hay más antidemocráticas en un gobernante que la demonización de la oposición. Zapatero no es quien para repartir credenciales de demócrata. El presidente se refirió también de forma velada a este periódico cuando afirmó que hay quien intenta «hacer una nueva valoración de la dictadura». EL MUNDO sólo pretende divulgar lo que fue el franquismo y lo está haciendo de manera crítica y rigurosa. Cabe interpretar el discurso de Zapatero como la culminación de una semana, en la que el PSOE ha hecho estallar una traca de crispación y rencor. La ofensiva empezó con la filtración de la conversación de Trashorras, continuó con los ataques de Rubalcaba al PP y a EL MUNDO, prosiguió con las descalificaciones de Chaves y Pepiño y concluyó con la intervención de Zapatero, que mal tiene que estar para reivindicar el felipismo, como hizo ayer. Habría que preguntarse a qué hubiera dedicado el PSOE su Conferencia sin esos ataques.