Nuevo ataque radical a Ciutadans el día que Rajoy concluye su campaña en Cataluña
16-06-06
REFERÉNDUM EN CATALUÑA / Campaña de persecución
Nuevo ataque radical a Ciutadans el día que Rajoy concluye su campaña en Cataluña
Dos asistentes tuvieron que ser atendidos tras ser golpeados con cascos de motorista por los boicoteadores del acto celebrado en Barcelona
FÉLIX MARTINEZ
REFERÉNDUM EN CATALUÑA / Campaña de persecución
Nuevo ataque radical a Ciutadans el día que Rajoy concluye su campaña en Cataluña
Dos asistentes tuvieron que ser atendidos tras ser golpeados con cascos de motorista por los boicoteadores del acto celebrado en Barcelona
FÉLIX MARTINEZ
BARCELONA.- Parecía que la calma había vuelto a la política catalana. Mariano Rajoy, presidente del PP, la formación cuyos actos habían sido blanco de los intentos de boicot de grupos independentistas, logró celebrar su segundo acto consecutivo sin que se registraran incidentes. Pero la plataforma no nacionalista Ciutadans de Catalunya, cuyo dirigente Arcadi Espada fue quien recibió la primera agresión de la campaña del Estatuto, volvió a convertirse en objetivo de los radicales.
(.../...)
La dirección del PP mantuvo la intensa agenda de actos de su presidente contra el nuevo Estatuto a pesar de que los primeros abucheos que se registraron el sábado en Hospitalet, se transformaron en lanzamiento de huevos y zarandeos de coches en Granollers y en Mataró. De manera que Rajoy ha concentrado todo el interés en sus últimas actuaciones en Cataluña previas al referéndum del próximo domingo. El acto central del PP, el miércoles en el Palacio de Congresos de Barcelona, ya se celebró sin incidentes. Y, ayer, en Lleida, en su despedida, Rajoy también pudo terminar el acto con tranquilidad.
Precisamente, las agresiones sufridas por Rajoy y por los dirigentes del PP protagonizaron una agria polémica entre el portavoz de los populares en el Congreso, Eduardo Zaplana, y el primer secretario del PSC y ministro de Industria, José Montilla. Zaplana acusó al PSC de estar detrás de los ataques al PP. La tibieza con la que Montilla y otros dirigentes socialistas condenaron las agresiones dio suficiente margen a Zaplana para relacionar a los socialistas catalanes con los intentos de boicot sufridos en los actos del PP. Y es que los dirigentes del PSC, antes de condenar los actos, se preguntaron públicamente a quién beneficiaban, cuando lo que se esperaba de ellos era una contundente declaración de repulsa.
Diferente suerte corrieron los miembros de la plataforma Ciutadans de Catalunya. La semana pasada, Arcadi Espada fue agredido por radicales independentistas. Espada comparecía ayer en un acto político en Manresa, que transcurrió sin apenas incidentes. Sin embargo, en un acto en Barcelona, en el centro cívico La Sedeta en el que participaba otro de los más notorios dirigentes de Ciutadans, el catedrático de Derecho Constitucional Francesc de Carreras, sí intentaron irrumpir varios radicales. Alrededor de 25 jóvenes de estética independentista intentaron acceder a las instalaciones en las que se celebraba el acto. Finalmente, dos de ellos se enfrentaron a dos miembros de la organización. Se produjo un forcejeo, y los radicales acabaron golpeando en la cabeza a los dos miembros de Ciutadans de Catalunya con cascos de moto. En ese momento, intervinieron efectivos de los Mossos d'Esquadra, que se encontraban presentes en el acto. Los agentes de la policía autonómica impidieron la entrada a los reventadores y procedieron a identificarles.
Inmediatamente después, el grupo de radicales se disolvió y, con media hora de retraso, el acto pudo celebrarse con normalidad. Los dos miembros de Ciutadans agredidos fueron atendidos por policontusiones y uno de ellos tuvo que ser trasladado al hospital.
El PP y Ciutadans de Catalunya no eran los únicos activistas del no que ayer mantenían su agenda política. Con menos entusiasmo, la dirección de Esquerra Republicana aún defendía su rechazo. Eso sí, los dirigentes independentistas se mostraban mucho más resignados a una victoria del sí de la que podrían tardar en recuperarse.
Más confiados se mostraban los dirigentes de los partidos del sí, el PSC, CiU e ICV-EUA que, tras comparecer arropados por el establishment catalán el miércoles en un acto cívico conjunto, volvieron ayer a la campaña de perfil bajo con la que han afrontado el referéndum. Y es que hoy llega el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a Barcelona para cerrar la campaña del frente del sí. En él confían para que haga buena parte del trabajo a la hora de movilizar al electorado partidario del Estatuto. En Zapatero y en Rajoy, cuya presencia en Cataluña ha sido percibida por el Gobierno de la Generalitat como un acicate para los votantes del sí. Ahora, la guinda del pastel la podría poner la meteorología. Si se confirma que el domingo el tiempo no acompañará a aquellos que pretenden pasar el día en la playa, la participación podría ser incluso superior a la prevista en las últimas encuestas oficiales.
Y los partidos del frente del sí están convencidos de que sólo sus electores se movilizarán, mientras languidece la iniciativa de los del no.
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La dirección del PP mantuvo la intensa agenda de actos de su presidente contra el nuevo Estatuto a pesar de que los primeros abucheos que se registraron el sábado en Hospitalet, se transformaron en lanzamiento de huevos y zarandeos de coches en Granollers y en Mataró. De manera que Rajoy ha concentrado todo el interés en sus últimas actuaciones en Cataluña previas al referéndum del próximo domingo. El acto central del PP, el miércoles en el Palacio de Congresos de Barcelona, ya se celebró sin incidentes. Y, ayer, en Lleida, en su despedida, Rajoy también pudo terminar el acto con tranquilidad.
Precisamente, las agresiones sufridas por Rajoy y por los dirigentes del PP protagonizaron una agria polémica entre el portavoz de los populares en el Congreso, Eduardo Zaplana, y el primer secretario del PSC y ministro de Industria, José Montilla. Zaplana acusó al PSC de estar detrás de los ataques al PP. La tibieza con la que Montilla y otros dirigentes socialistas condenaron las agresiones dio suficiente margen a Zaplana para relacionar a los socialistas catalanes con los intentos de boicot sufridos en los actos del PP. Y es que los dirigentes del PSC, antes de condenar los actos, se preguntaron públicamente a quién beneficiaban, cuando lo que se esperaba de ellos era una contundente declaración de repulsa.
Diferente suerte corrieron los miembros de la plataforma Ciutadans de Catalunya. La semana pasada, Arcadi Espada fue agredido por radicales independentistas. Espada comparecía ayer en un acto político en Manresa, que transcurrió sin apenas incidentes. Sin embargo, en un acto en Barcelona, en el centro cívico La Sedeta en el que participaba otro de los más notorios dirigentes de Ciutadans, el catedrático de Derecho Constitucional Francesc de Carreras, sí intentaron irrumpir varios radicales. Alrededor de 25 jóvenes de estética independentista intentaron acceder a las instalaciones en las que se celebraba el acto. Finalmente, dos de ellos se enfrentaron a dos miembros de la organización. Se produjo un forcejeo, y los radicales acabaron golpeando en la cabeza a los dos miembros de Ciutadans de Catalunya con cascos de moto. En ese momento, intervinieron efectivos de los Mossos d'Esquadra, que se encontraban presentes en el acto. Los agentes de la policía autonómica impidieron la entrada a los reventadores y procedieron a identificarles.
Inmediatamente después, el grupo de radicales se disolvió y, con media hora de retraso, el acto pudo celebrarse con normalidad. Los dos miembros de Ciutadans agredidos fueron atendidos por policontusiones y uno de ellos tuvo que ser trasladado al hospital.
El PP y Ciutadans de Catalunya no eran los únicos activistas del no que ayer mantenían su agenda política. Con menos entusiasmo, la dirección de Esquerra Republicana aún defendía su rechazo. Eso sí, los dirigentes independentistas se mostraban mucho más resignados a una victoria del sí de la que podrían tardar en recuperarse.
Más confiados se mostraban los dirigentes de los partidos del sí, el PSC, CiU e ICV-EUA que, tras comparecer arropados por el establishment catalán el miércoles en un acto cívico conjunto, volvieron ayer a la campaña de perfil bajo con la que han afrontado el referéndum. Y es que hoy llega el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a Barcelona para cerrar la campaña del frente del sí. En él confían para que haga buena parte del trabajo a la hora de movilizar al electorado partidario del Estatuto. En Zapatero y en Rajoy, cuya presencia en Cataluña ha sido percibida por el Gobierno de la Generalitat como un acicate para los votantes del sí. Ahora, la guinda del pastel la podría poner la meteorología. Si se confirma que el domingo el tiempo no acompañará a aquellos que pretenden pasar el día en la playa, la participación podría ser incluso superior a la prevista en las últimas encuestas oficiales.
Y los partidos del frente del sí están convencidos de que sólo sus electores se movilizarán, mientras languidece la iniciativa de los del no.
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