Batasuna critica a la Iglesia por exigir sólo «a una de las partes» que pida perdón a las víctimas
17-08-06
Batasuna critica a la Iglesia por exigir sólo «a una de las partes» que pida perdón a las víctimas
R. L. DE CALLE
BILBAO.- Las palabras de los obispos vascos durante la festividad de la Virgen de Begoña no calaron en la ilegalizada Batasuna que, además de rechazar que únicamente tenga que pedir perdón «una de las partes» del conflicto -los miembros de ETA-, limitó el papel de la Iglesia a la búsqueda de la «reconciliación» de «todas las partes» del mismo.
El dirigente abertzale Joseba Alvarez respondió así al llamamiento a ETA efectuado por el obispo de Bilbao y presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez, quien reclamó a «los terroristas» que pidan «perdón» por «el mal que han causado». El dirigente de la formación ilegalizada limitó la labor de los prelados a la búsqueda de la «reconciliación» desde la asunción de varios prismas, ya que «el conflicto tiene varios frentes». Pero también reforzó su negativa al considerar ese emplazamiento como un mero «gesto» que forma parte de una etapa ya «superada»; en su opinión, tras casi cinco meses de alto el fuego permanente los gestos deben dejar espacio a los «pasos concretos» en favor del llamado «proceso de paz y normalización».
(.../...)
Pese a todo ello, Alvarez admitió que «el conflicto político y militar que ha vivido Euskal Herria en estas últimas décadas ha causado daños, que deberán ser reconocidos».
A continuación, el portavoz radical se refirió a las reflexiones del obispo emérito de San Sebastián, José María Setién, quien rechazó la posible vinculación del proceso de paz con el debate político en Euskadi sobre la superación del marco jurídico actual.
Alvarez recordó que en la propuesta de Anoeta Batasuna desvinculó ambos procesos, y admitió que las dos negociaciones «no van juntas», pero también dejó claro que ambas forman parte de una «solución íntegra del conflicto vasco» y que «no va a haber acuerdo de desmilitarización si no lo hay en la normalización, y viceversa».
A partir de ese momento, el dirigente abertzale volvió a poner sobre la mesa las exigencias de la formación ilegalizada en torno a la amnistía de los presos de la organización terrorista ETA, la legalización de Batasuna y el derecho de autodeterminación. Tras afirmar que los reclusos etarras «van a tener que salir a la calle en la resolución del conflicto», afirmó que el acuerdo político «global e integral» debe incluir «necesariamente» el reconocimiento del derecho a la libre determinación de los vascos, y la creación de la mesa de partidos.
Batasuna critica a la Iglesia por exigir sólo «a una de las partes» que pida perdón a las víctimas
R. L. DE CALLE
BILBAO.- Las palabras de los obispos vascos durante la festividad de la Virgen de Begoña no calaron en la ilegalizada Batasuna que, además de rechazar que únicamente tenga que pedir perdón «una de las partes» del conflicto -los miembros de ETA-, limitó el papel de la Iglesia a la búsqueda de la «reconciliación» de «todas las partes» del mismo.
El dirigente abertzale Joseba Alvarez respondió así al llamamiento a ETA efectuado por el obispo de Bilbao y presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez, quien reclamó a «los terroristas» que pidan «perdón» por «el mal que han causado». El dirigente de la formación ilegalizada limitó la labor de los prelados a la búsqueda de la «reconciliación» desde la asunción de varios prismas, ya que «el conflicto tiene varios frentes». Pero también reforzó su negativa al considerar ese emplazamiento como un mero «gesto» que forma parte de una etapa ya «superada»; en su opinión, tras casi cinco meses de alto el fuego permanente los gestos deben dejar espacio a los «pasos concretos» en favor del llamado «proceso de paz y normalización».
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Pese a todo ello, Alvarez admitió que «el conflicto político y militar que ha vivido Euskal Herria en estas últimas décadas ha causado daños, que deberán ser reconocidos».
A continuación, el portavoz radical se refirió a las reflexiones del obispo emérito de San Sebastián, José María Setién, quien rechazó la posible vinculación del proceso de paz con el debate político en Euskadi sobre la superación del marco jurídico actual.
Alvarez recordó que en la propuesta de Anoeta Batasuna desvinculó ambos procesos, y admitió que las dos negociaciones «no van juntas», pero también dejó claro que ambas forman parte de una «solución íntegra del conflicto vasco» y que «no va a haber acuerdo de desmilitarización si no lo hay en la normalización, y viceversa».
A partir de ese momento, el dirigente abertzale volvió a poner sobre la mesa las exigencias de la formación ilegalizada en torno a la amnistía de los presos de la organización terrorista ETA, la legalización de Batasuna y el derecho de autodeterminación. Tras afirmar que los reclusos etarras «van a tener que salir a la calle en la resolución del conflicto», afirmó que el acuerdo político «global e integral» debe incluir «necesariamente» el reconocimiento del derecho a la libre determinación de los vascos, y la creación de la mesa de partidos.
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